La superintendente de Pensiones, Rocío Aguilar, considera que es hora de ir pensando en eliminar la pensión mínima de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y sustituirla por un modelo de jubilación básica universal.
Así lo externó como parte de un foro organizado por la Academia de Centroamérica sobre el futuro de las pensiones en Costa Rica, en el que también participaron el exsuperintendente de Pensiones Edgar Robles y el expresidente Miguel Ángel Rodríguez.
Según Aguilar, parte de los problemas del Régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), es que, al día de hoy, más del 50 % de los asegurados reciben una pensión mayor a la que contribuyeron.
Para la exministra de Hacienda, está claro que se ocupa de una reforma integral que pasa por un replanteamiento de las cargas sobre la seguridad social, unificar las cuotas del Estado como patrono, y crear un seguro de desempleo de la mano con el Fondo de Capitalización Laboral (FCL).
“No se pueden seguir posponiendo los ajustes. Se requieren mecanismos de autobalance. Hay que pensar si la cuota del Estado debería de ser redireccionada”, manifestó.
Aguilar no omitió señalar que, aunque se elimine la pensión mínima, está debe mantener el principio de invalidez, orfandad y asistencia.
De acuerdo con la superintendente, hoy existe un riesgo fiscal importante relacionado con el gasto en pensiones como porcentaje asociado al presupuesto.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indicó en un informe recientemente que el sistema contributivo no genera suficientes recursos para ser sostenible en el mediano plazo.
Señaló que, dadas las tendencias demográficas actuales, un estudio actuarial reciente muestra que el sistema experimentará déficits operativos en unos 10 años y las reservas se agotarán en 15 a 20 años.
Se proyectó que el gasto público en pensiones alcanzaría el 9 % del Producto Interno Bruto (PIB) para 2050, lo que coloca a Costa Rica cerca del promedio de la OCDE.
“La brecha entre los gastos e ingresos por pensiones tendrá que ser financiada por el fondo de reserva a partir de 2030 y, una vez que el fondo de reserva se agote en 2037, mediante el presupuesto del gobierno central”, concluyó el organismo de previo a la reciente reforma del IVM.
Por su parte, Robles mencionó que un 59 % de las personas mayores de 60 años no tienen una pensión en Costa Rica. “El sistema de pensiones costarricense no le está llegando a las personas y el régimen del IVM se agotará en una década. Hay que eliminar la pobreza en vejez, no la estamos atendiendo bien. Somos uno de los países de Latinoamérica con mayores niveles de pobreza en la población de 65 años o más”, destacó.
¿QUÉ ES?
Se plantea una cobertura universal para las personas adultas mayores en situación de pobreza, mayores de 65 años, no cubiertos por otros regímenes de pensión, otorgando una pensión básica no inferior al 50 % de la pensión mínima “por vejez” del IVM.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Lunes 13 Septiembre, 2021
HORA: 12:00 AM
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