Martes 30, Abril 2024

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° San José, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Alajuela, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Cartago, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Heredia, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Limón, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Guanacaste, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Puntarenas, CR

Opinión

La niñez no tiene mucho que celebrar

Editorial

Desde que inició setiembre, muchos padres están pensando en qué detallito darles a sus hijos por el Día del Niño, pues en muchos hogares costarricenses se acostumbra celebrarles esa fecha especial llevándolos a comer o comprándoles algún juguetico. 

En los kínderes y las primarias también les hacen una actividad lúdica que les permite compartir y sacar esa dulzura que llevan dentro. Las actividades por lo general se realizan en conjunto entre madres y maestras.

La idea de implantar esta fecha especial comprende celebrar y dejar constancia de los derechos de los más pequeños, hacer que ellos los conozcan, pero principalmente que sepan cómo pedirlos en caso de que se los violenten. 

Pero seamos realistas, así como muchos pequeños en nuestro país viven el Día del Niño en todo su esplendor, también existe un gran porcentaje de menores que no tienen absolutamente nada que celebrar porque son víctimas de agresiones, injusticias, abusos y otro largo y doloroso viacrucis de situaciones lamentables.

De hecho, autoridades como el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) hicieron un llamado a la población porque las cifras que hay en torno a los menores de edad son muy desalentadoras, incluso afirman que la tasa de violencia ha aumentado de manera tremenda en los últimos 3 años. 

Desde mayo de 2020 hasta mayo de 2021, 33 menores fueron víctimas de violación, estupro (relación sexual entre mayor y mayor de edad) y abuso deshonesto, cifras que continúan en crecimiento cada día.

De acuerdo con las autoridades judiciales, 19 menores fueron víctimas de agresión, 15 de corrupción o proxenetismo y 9 sufrieron acoso callejero. Sin embargo, hasta setiembre del año en curso se han reportado más casos, entre los cuales destacan tenencia, difusión y producción de pornografía infantil, tráfico de menores y trata de personas.

Antes de festejar cualquier cosa, los adultos debemos aprender a protegerlos y entenderlos, llenarlos de amor, ya que muchos de ellos se sienten como un objeto más en la casa por las múltiples obligaciones de sus padres o las personas que tienen la responsabilidad de velar por ellos. 

Resulta impresionante que el PANI reciba en promedio 44 mil llamadas por amenaza o violencia contra los derechos de los menores. Se tienen que encender las alarmas en la sociedad tica. 

Es justo y necesario que a los responsables se les aplique una sanción para que aprendan. Además, se debe castigar a quienes fomentan el maltrato o a quienes callan. Los adultos somos culpables de lo que hacen los pequeños y en lo que se convierten de grandes.

En lugar de estar criando niños felices, con ganas de vivir y proyectar una adultez exitosa, estamos formando personas que de grandes van a querer desquitarse por todo lo que sufrieron. Eso no puede continuar así.

Lastimosamente, en nuestro país también se vive una tragedia silenciosa que carcome a muchos de los hogares, constantemente se encienden las señales de alerta con los niños y jóvenes que quieren acabar con sus vidas. 

A ciencia cierta no se sabe si es que ahora se dan más casos o es que la gente se ha envalentonado y denuncia, cosa que tal vez antes no sucedía. Independientemente, lo primordial es que nadie se quede callado, porque muchas veces, en medio de su vulnerabilidad, la única opción que tienen los menores es que un adulto se envalentone y los defienda.

Un dato que no podemos pasar por alto es que muchos de los abusos, violaciones y agresiones vienen desde el hogar, situación que urge detener porque precisamente es aquí donde más deberían de cuidarlos y velar por su bienestar.

Es lamentable ver las noticias y darse cuenta de la gran cantidad de pequeños a los que les roban su inocencia, desgraciadamente cada vez es más común que sea alguno de sus padres quien cometa los abusos o en otros casos personas sumamente cercanas a la familia, como tíos y abuelos.

Antes se asociaban las lamentables noticias de autoeliminaciones a jóvenes que se sentían incomprendidos en su adolescencia. En la actualidad, las estadísticas reportan que esos incidentes aumentan en niños entre 8 y 10 años, edades en las cuales la única preocupación que deben tener es jugar y asistir a la escuela. 

Para que estas terribles situaciones dejen de presentarse hay dos opciones: la primera es tomar el toro por los cuernos y denunciar todo lo que nos parezca anómalo y, lo segundo, empoderar a los menores de nuestras familias para que no se dejen intimidar ni amedrentar por los enfermos, perversos y aprovechados que desean abusar de su inocencia.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

EMAIL: [email protected]

Sábado 11 Septiembre, 2021

HORA: 12:00 AM

Enviar noticia por correo electrónico

SIGUIENTE NOTICIA

ÚLTIMA HORA