Diario Extra - Finanzas del gobierno se ahogan en la crisis

Las finanzas del gobierno arden en la crisis. Cada vez es menor el campo de acción que tiene el gobierno para mejorar las condiciones en que se encuentra la apretada situación fiscal que afronta el sector público.
Un reciente informe de la Contraloría General de la República (CGR) revela que durante 2020 todas las áreas que componen el sector público enfrentaron una dura realidad, la reducción de sus presupuestos, la reasignación de recursos y en ocasiones la no ejecución presupuestaria para tratar de contener la crisis.
“Aun cuando la situación de los impuestos, la deuda y el déficit financiero fue atemperada conforme avanzaron los meses, y se revisaron al alza las estadísticas del PIB, el desbalance fiscal superó a los experimentados en mucho tiempo, en un contexto en que la contracción de la economía contribuyó a agravar los valores relativos de déficit (8,1%) y deuda (67,5%), muy por encima de los niveles de sostenibilidad que puede gestionar el país”, se lee en el documento.
Precisamente la Contraloría menciona que los porcentajes a los que aumentó la crisis financiera son inclusive superiores a lo que se esperaba después de la reforma fiscal de 2018.

EQUILIBRIO

El informe menciona que si años atrás los gobiernos hubiesen optado por buscar un superávit primario, la creciente situación del pago de intereses y de la deuda no estarían ahogando las finanzas del Estado, sin embargo la tasa de interés de la deuda presiona tanto al alza que cada vez cuesta más lograr la tan anhelada estabilidad.
“El equilibrio primario hubiera permitido en el pasado estabilizar la deuda PIB, pero la condición es ahora mucho más seria, pues se precisa un superávit primario, a no ser que la tasa de interés pueda ser reducida en forma apreciable”, cita el ente contralor.
Es así como el informe explica que para 2020, mientras el déficit del Gobierno central llegó al 8,1% del Producto Interno Bruto (PIB), el gasto en intereses subió al 4,7% del PIB y el déficit primario llegó al 3,4% del PIB, el crecimiento del PIB cayó un 10,4%.

AFECTACIONES

El ente contralor hace énfasis en que la crisis del Gobierno central también salpica las instituciones.
“Las pensiones y jubilaciones aumentaron en ¢119 mil millones, con ¢10 mil millones más en las no contributivas. El Gobierno central y las instituciones descentralizadas presentan ese incremento en transferencias, y el primero sufrió un considerable aumento en el déficit financiero consolidado; es decir, la merma de ingresos se acompañó de restricción en desembolsos a otras instituciones y órganos”, explicó la Contraloría.
Sin embargo el informe destaca que en el caso de las instituciones públicas no financieras el comportamiento de la crisis tuvo una leve mejoría, aunque también influenciada por la pandemia.
“Se explica en parte este superávit por una menor inversión física de la ESPH, en alrededor de ¢80 mil millones, así como por una mayor estabilidad de los ingresos de este grupo, donde la reducción de los ingresos estuvo concentrada en algunas entidades y fue acompañada en la misma dirección por los gastos asociados”, indica el informe.
Finalmente, la Contraloría hace un llamado al gobierno para que tome medidas fiscales prontas y progresivas a fin de mejorar la situación financiera.