Durante los últimos 11 meses se han dado siete hechos de sangre en barberías, donde asesinaron a trabajadores o clientes dentro de los establecimientos.
Para los expertos en seguridad este patrón debería estar encendiendo las alertas de las autoridades, pues algunas organizaciones delictivas podrían estar aprovechando del negocio para actividades ilícitas.
Esta situación afecta a aquellos barberos o propietarios de negocios que cumplen con las leyes y ejercen su profesión de manera correcta, pues la población empieza a temer el ingreso a los establecimientos de este tipo.
“Desde unos siete años atrás, el negocio de barbería ha sido corrompido. Las autoridades de Salud, Trabajo y Seguridad Pública han hecho poco más que nada a efecto de control. ¿Control de qué? En este tipo de negocio, muchos tienen a sus empleados sin cumplir con las responsabilidades laborales y sociales siendo además que algunos ‘barberos’ vienen de purgar pena por delitos muy graves, como el narcotráfico, el homicidio, entre otros; algunas, personas con deudas a pagar con sangre”, explicó Minor Araya, experto en seguridad y exjefe del grupo de choque del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El experto señaló que, en algunos de estos negocios, hasta se ha dicho que trafican droga, y otros, con un nivel más alto, funcionan como una herramienta para la legitimación de capitales.
“En otras palabras, el buen ciudadano necesariamente debe escoger a su barbero y barbería a efecto de no perder la vida durante un intercambio de disparos entre maleantes”, añadió.
Sobre lo que se puede esperar de las autoridades policiales y judiciales mencionó que “siendo objetivo tanto como franco, para nuestra realidad y abultados antecedentes, no creo que promuevan algo real, ideal y productivo para neutralizar este tipo de focos de altísimo riesgo y alcahuetería criminal que ofenden principalmente a aquellos verdaderos empresarios y profesionales en barbería que sí respetan, con gran esfuerzo y honestidad, las leyes de nuestro país”.
Por su parte, Rafael Guillén, exdirector del OIJ, dijo a DIARIO EXTRA que le extraña cuando se dan estos hechos, por lo que considera que debe haber alguna razón que las autoridades deberían estar indagando a fondo, con el objetivo de determinar cuáles son los motivos por los que existe la inclinación hacia estos negocios.
“Sin afirmar nada, pero la investigación debe conducir a averiguar si hay algún motivo que tenga trascendencia en ese incremento de la criminalidad. La autoridad en la investigación tiene que ser muy a fondo para ver si existen elementos que provoquen estas cosas y claro que llama la atención”, destacó.
Para Guillén la idea es que los cuerpos policiales administrativos y judiciales tomen nota de las situaciones que se dan, e incluso destacó que probablemente ya estén investigando con sigilo.
HECHOS
MARZO 2020
A finales de marzo del año anterior, Dennis Alexander Cruz Azofeifa de 26 años, quien se ganaba la vida como peluquero, murió en Bananito Sur de Valle La Estrella, Limón. Este joven era vecino de la zona y tenía dos hijos de 8 y 2 años.
La Policía Judicial reveló que, por las amenazas que había recibido, en apariencia el móvil de su muerte podría deberse a una venganza por venta de droga.
Cruz estaba en la peluquería atendiendo a unos clientes cuando de pronto ingresó un sujeto con el rostro cubierto y sin decir una sola palabra comenzó a disparar.
En el tiroteo el sospechoso logró herir al barbero en la cabeza, el abdomen, la espalda y extremidades superiores.
Además, impactó a otro hombre que identificaron con los apellidos Flores Villareal, de 34 años; esta persona recibió un plomazo en la mandíbula.
ABRIL 2020
Un joven de 27 años, identificado como Kevin Andrey Canales Bustos, fue acribillado en las afueras de su casa cuando dos sujetos pasaron en motocicleta y la emprendieron a tiros contra él. El hecho se dio en El Destierro, cerca de la escuela de Barrio El Carmen en Pocora de Guácimo, Limón.
El hombre trabajaba como peluquero y estaba afuera de su casa cuando dos sujetos que viajaban en moto la emprendieron a tiros contra él, impactándolo en al menos 20 ocasiones en diferentes partes del cuerpo.
Tras el ataque, el herido recibió auxilio de sus vecinos, quienes lo subieron a un vehículo y lo trasladaron a la clínica de Siquirres, donde falleció pocos minutos después de su ingreso.
Canales tenía antecedentes por homicidio y homicidio calificado, pero ninguna de las causas estaba pendiente, es decir, ya había cumplido las penas correspondientes. En 2013, el joven fue uno de los más buscados por el OIJ debido a que tenía orden de captura por dos condenas pendientes, una por robo agravado y otra por homicidio calificado.
MAYO 2020
En una barbería en Heredia asesinaron a balazos a Luis Miguel Quesada López de 28 años, quien se preparaba para que le cortaran el pelo.
El cliente estaba en la barbería Don Rubén, ubicada en Bajo Los Molinos en Heredia, donde fue atacado a balazos por sujetos desconocidos que llegaron con cascos negros, abordo de una motocicleta.
En el lugar los paramédicos realizaron la respectiva revisión del hombre que ya no presentaba signos vitales, por lo que se declaró fallecido en el sitio y se entregó la escena a la Policía.
La víctima tenía siete impactos por arma de fuego, seis dieron en el tórax y uno en la cabeza.
JULIO 2020
Un ataque a una vivienda, donde cortaban pelo en una cochera, en Calle Blancos, Goicoechea, cobró la vida de José Mario Rodríguez Zúñiga de 29 años, quien trabajaba como peluquero y atendía a un cliente.
Los vecinos de Barrio El Encanto escucharon varias detonaciones que les pusieron los nervios de punta y al salir se encontraron con la sangrienta escena en la cochera usada para el negocio.
Cerca del lugar vive una doctora, quien no dudó en prestar atención y llegó hasta el sitio, a su llegada Rodríguez estaba sin signos vitales, mientras que el otro sujeto, quien era cliente, se encontraba gravemente herido.
El peluquero recibió un impacto de bala en la cabeza a nivel occipital, propinado por un sujeto que pasó caminando, quien portaba un casco negro cerrado y una camisa roja. Luego del ataque, el gatillero subió a una moto y huyó de la escena junto con su cómplice.
JULIO 2020
En una barbería de barrio San Rafael, Turrialba, murió un joven de 28 años identificado como Byron Elizondo, a quien acribillaron mientras le cortaban el pelo.
El hombre era atendido cuando al local ingresó otro sujeto, quien furioso empezó a preguntar por él, ya que en apariencia habrían tenido un problema de índole personal.
El agresor les pidió a los dueños del local que no se metieran y empezó a dispararle a su enemigo, quien cayó herido recostado sobre una pared con impactos entre el pecho y la espalda, así como en una pierna.
El gatillero salió como si nada hubiera pasado del lugar, sin meterse con nadie más. Dichosamente los otros clientes y trabajadores del negocio resultaron ilesos.
Según fuentes policiales, el sospechoso reclamó a Elizondo por una supuesta amenaza contra un familiar.
NOVIEMBRE 2020
De siete balazos acabaron con la vida de un panameño identificado como Everardo José Caballero Mora, de 33 años, quien estaba en una barbería en Cartago.
Los empleados y otros clientes de la barbería se llevaron el susto de sus vidas cuando llegó un gatillero y le propinó siete impactos de bala al panameño naturalizado costarricense y quien residía en Canoas de Corredores.
El asesinato ocurrió en el negocio que se ubica en las instalaciones del centro comercial Plaza Madrid en Concepción de La Unión, Cartago.
El sujeto llegó en un vehículo al centro comercial y se dirigió a la barbería como cliente. Mientras esperaba a ser atendido, al sitio llegó una motocicleta en la que viajaban dos sujetos con el rostro cubierto.
Rápidamente el conductor de ese automotor se estacionó frente al negocio y el que iba como acompañante se bajó para caminar hasta el interior de la barbería, fue ahí cuando se dirigió hasta donde estaba Caballero y sin mediar palabra alguna le mandó una ráfaga de al menos nueve plomazos hasta verlo caer. Posteriormente el gatillero salió corriendo del local, se subió a la moto y huyó junto a su cómplice.
ENERO 2021
Un colombiano de 28 años murió en una barbería ubicada en el barrio San Gerardo de San Rafael de Alajuela cuando esperaba para ser atendido.
Se trata de Wilson Omar Becerra Villamizar, quien llegó como cliente al local.
Cuando le tocó su turno y se sentó en la silla para ser atendido, al establecimiento comercial ingresaron dos sujetos, quienes se acercaron al colombiano y sin mediar palabra le propinaron al menos 15 balazos.
Tanto el peluquero que atendía a Becerra como sus compañeros y otros clientes quedaron fríos e inmóviles del susto, pero socorrieron al extranjero mientras llegaban los paramédicos.
Los dos sujetos que ingresaron al local se dieron a la fuga tras atacar al cliente.
PERIODISTA: Sharon Cascante Lizano
CRÉDITOS: Fotos: Archivo
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Martes 23 Febrero, 2021
HORA: 12:00 AM
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