Diario Extra - Zozobra por pérdida de ¢380 mills en Caja de Préstamos

La Caja de Préstamos y Descuentos de los Empleados del Poder Judicial (Caprede) atraviesa por una situación financiera complicada, la cual generó que por primera vez desde su creación no pudieran pagar a sus afiliados sobre rendimientos.
Una fuente anónima hizo llegar a DIARIO EXTRA, los supuestos estados financieros no auditados a julio del año anterior, donde se menciona una pérdida en el orden de los ¢380 millones.
Al parecer, las normas de Caprede indican que en caso de pérdida pueden abstenerse de pagar rendimientos. Se estima que cuentan con unos 3 mil afiliados a quienes se les aplican deducciones de planilla.
La entidad se manifestó en su sitio web señalando: “Es necesario dar una respuesta clara en cuanto a que en el año 2020 no se repartieran excedentes, y a pesar de que por Ley el período fiscal pasó de vencer al 30 de setiembre al 31 de diciembre de cada año, se estima que no habrá tal repartición”.
Agregaron que esto es producto de que deben atenderse obligaciones de la empresa, lo que imposibilita dar prioridad a rentabilizar las acciones de sus afiliados.
También reconocen que se ha informado por diferentes canales sobre la situación de falta de liquidez que enfrentan, pero que según manifiestan se ha ido resolviendo.
En Caprede reconocen que el estado actual no es solo producto de la pandemia, sino que responde a una serie de situaciones que han golpeado a la entidad.
“Se podría hacer una recapitulación de culpables, decisiones con desacierto o bien de falta de comunicación, pero lo importante es lo que se vaya a realizar”, destacaron.
El Periódico de Más Venta en Costa Rica se comunicó con Alexánder Vindas, gerente de la entidad, para preguntarle si era verdad que para este año el patrimonio había bajado a los ¢6.694 millones, como dicen los estados financieros no auditados, no obstante, Vindas manifestó que eso era falso.
Posteriormente, solicitó se le enviaran las consultas a través de un correo electrónico, pero no hubo respuesta al cierre de la edición, a pesar de que en la rendición de cuentas a sus afiliados hablan de transparencia.
Por su naturaleza, Caprede es de carácter cerrado, por lo que no está supervisada por la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).

OPINIÓN CONTABLE DESFAVORABLE

Este medio también cuenta con copia de los estados financieros auditados de Caprede para los años 2018-2019 en los que la firma Castillo-Dávila, Asociados emite una opinión desfavorable.
En dicho documento se habla de que el patrimonio pasó de los ¢8.353 millones en el 2018 a los ¢7.340 millones en el 2019. Además, menciona pérdidas por el orden de los ¢217 millones para ese período.
Según establece el informe, Caprede no registró un deterioro por la liquidación de otra empresa llamada Caprede Factoreo, a la que señala como una subsidiaria.
Actualmente se investiga si la primera habría sido víctima de una estafa por parte de la segunda por un monto relativo a los ¢5 mil millones. El caso está en manos del Ministerio Público.
“Sobre lo señalado en los párrafos anteriores al 30 de setiembre de 2019, implica que los resultados económicos de Caprede no reflejan pérdidas potenciales por la suma de ¢9.021.651.039 y para el año 2018 de ¢10.063.996.391, sobre al particular la administración está a la espera del resultado de la acción legal entablada por el deterioro de la cartera de su subsidiaria”, detalla el documento.
A parte de la deuda con los afiliados, la entidad tiene en este momento un préstamo con el Banco Nacional que ronda los ¢12 mil millones.