Las autoridades colombianas detuvieron una embarcación en Alta Guajira, en la que determinaron que las organizaciones criminales costarricenses están intercambiando armas por drogas.
Según el medio La Guajira Hoy, de Colombia, el Servicio de Inteligencia de la Policía Antinarcóticos explicó que “la transacción de la droga por las armas había sido realizada por organizaciones de Costa Rica con un grupo organizado de delincuentes comunes que están operando en varios corregimientos de la Alta Guajira”.
De acuerdo con el informe de los medios del país cafetero, las armas incluyen material de guerra que se compone de fusiles de asalto, proveedores y municiones.
El cargamento lo incautó la Policía Nacional de Colombia con el apoyo de la Fuerza Aérea y la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
El armamento lo llevaban en una lancha, la cual al ser descubierta los oficiales obligaron a los tripulantes a detenerse en la playa de Puerto Cañón, en Alta Guajira.
La información la suministraron los organismos de seguridad y de lucha contra el tráfico de estupefacientes, quienes explicaron con detalle que la embarcación la avistaron mar adentro.
La Policía Nacional adicionó que cuando se hicieron los reportes al personal de tierra y mar para que se desplazara al sitio e interceptara la nave era muy seguro que hubieran “hecho un intercambio de droga por armamento”.
“Cuando los Comandos Jungla llegaron al sitio, los ocupantes de la lancha ya se habían fugado, dejando varias bolsas en las que pudieron encontrar el armamento”, citó el medio de comunicación colombiano, haciendo referencia al reporte oficial.
La Dirección Nacional de la Policía informó que en la embarcación confiscada hallaron 8 fusiles Mini Draco calibre 7.62 mm de fabricación rumana, 16 proveedores plásticos marca Moe y 475 cartuchos calibre 7.62 para los fusiles que suelen utilizar los grupos armados que operan al margen de la ley en esa región de la geografía colombiana.
OTRO ARSENAL
En Colombia decomisaron en setiembre de 2020 un arsenal similar, por lo que investigan si ambos casos están relacionados.
Las autoridades que ejercen el control en Alta Guajira en esa oportunidad dieron otro golpe a estas organizaciones cuando ubicaron una caleta subterránea, en la que habían depositado 9 fusiles de asalto y 1 subametralladora, todas de diseños modernos y fabricación europea.
En esa ocasión además incautaron más de 1.000 cartuchos para fusil y 1 GPS.
• Minor Araya, criminólogo y experto en seguridad
“SON ARMAS RUMANAS PARA ASALTO MILITAR”
“En Costa Rica desde los años 80 el tráfico de armas pequeñas ha sido más que real, es fuerte y ha demostrado ser muy escurridizo. Lo poroso de nuestras fronteras, en especial la norte, y la astucia del criminal tico han conseguido mantener estable el ingreso de armas, incluso de buen nivel. Hoy no debe asombrarnos que el traficante tico pague sus embarques de droga con armas rumanas, aptas para el asalto militar aerotransportado. Lo que sí nos debe extrañar como costarricenses es por qué nuestras autoridades han ‘arrinconado’ al portador legal de armas, mientras que al ilegal y a su amplio y longevo mercado negro por lo visto poco o ningún daño le ha hecho. Es por lo anterior que no debe extrañarnos en lo absoluto que el ingenio del traficante tico intercambie material bélico a sus homólogos del Sur por droga y que un 31 de diciembre nuestra mafia celebre, a la libre, disparando sus nutridos rifles de asalto al aire. Por supuesto que este asunto debe ser motivo a efecto de que nuestras autoridades nos brinden muchas respuestas acerca de un añejo fenómeno que evidentemente no han logrado disminuir”.
PERIODISTA: Sharon Cascante Lizano
CRÉDITOS: Foto: La Guajira Hoy
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Viernes 08 Enero, 2021
HORA: 12:00 AM
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