Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) capturaron a un menor de 17 años que portaba una pistola calibre 9 milímetros que se reportó como robada a uno de los agentes de ese cuerpo policial.
El pistolero presumía que el arma era de un policía y según algunos lugareños, quienes prefirieron el anonimato, decía que la vendía, pero tenía un plus por ser del OIJ, por lo que el precio debía ser un poco más alto.
Agregaron que sembraba el miedo con esa pistola para vender drogas, sin embargo fue sorprendido por los judiciales, quienes realizaban labores de investigación cuando lo divisaron con el arma en la mano mientras caminaba por Primero de Mayo, Aserrí.
Los agentes se identificaron como policías y lo detuvieron sin que opusiera resistencia, por lo que de inmediato custodiaron el lugar y coordinaron con la Sección Penal Juvenil, que llegó y trasladó al adolescente a la fiscalía, donde espera medidas cautelares.
El arma, que es sometida a pesquisas para determinar a cuál agente estaba asignada, tenía el cargador y estaba en un canguro con 14 puchos de marihuana, 81 piedras de crack, varias puntas de cocaína y una granada de fragmentación.
