Un privado de libertad del ámbito B de Mediana Cerrada de La Reforma, identificado como Edwin Alexis Tencio Rodríguez, sería el cabecilla de una organización dedicada a estafar mediante llamadas telefónicas, a este sujeto el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) le decomisó ¢7 millones en una bodega.
Según las autoridades, el recluso descuenta una condena de 43 años por los delitos de homicidio simple, homicidio agravado y hurto simple y desde mayo del 2002 le achacan el delito de falsedad ideológica.
Al parecer, Tencio Rodríguez trabajaba en conjunto con tres funcionarios penitenciarios.
Presuntamente un oficial de apellido Irigoyen, que fungía como inspector a.i. y al que también se detuvo, era el encargado de introducir el efectivo al centro penal.
El dinero incautado estaba en efectivo en billetes de diferente denominación y que, en apariencia, provenía de los cobros de las estafas que se hacían en la calle.
Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que desde agosto del 2012 Irigoyen es policía y se desempeñaba como oficial de guardia, al parecer se encargaba de resguardar los fajos de billetes que estaban en una bodega ubicada en una zona cercana a la oficialía de guardia de donde sacaba dinero según lo dispusiera el reo.
La policía no descarta que el oficial sea hombre de confianza del director del centro penal de apellido Pérez y de la directora a.i. del ámbito B, apellidada Bocan, a quienes el OIJ les allanó la oficina y decomisó los teléfonos celulares tanto los personales como los de trabajo.
Inclusive, trascendió que los investigadores mantuvieron incomunicados a ambos funcionarios y nadie podía entrar mientras se hacían las diligencias respectivas, que al final decomisaron papelería importante para la investigación.
Irigoyen, Pérez y Bocan están en la mira judicial, así como en la de sus superiores del Ministerio de Justicia, quienes podrían entablar una investigación administrativa para que, en caso de encontrarlos culpables, sentar las responsabilidades del caso.
Asimismo, El Periódico del Pueblo tuvo conocimiento de que el director de La Reforma pone a dedo a los directores de ámbito, algunos de los cuales no cuentan con los requisitos para tal puesto.
MOVIMIENTO DUDOSO
Allegados a las pesquisas agregaron que el reo Tencio Rodríguez había sido trasladado de ámbito junto a los presuntos miembros del grupo estafador tras una revuelta donde resultaron policías penitenciarios heridos, entre ellos un supervisor y un oficial de inteligencia.
El recluso fue trasladado a Máxima Seguridad donde permaneció varios meses, sin embargo, en un movimiento que pareció extraño, Tencio fue devuelto al ámbito D4 donde se daban las estafas, por lo que se investiga si existió tráfico de influencias.
CELULARES SATELITALES
Fuentes allegadas a la investigación agregaron tener conocimiento de que en el ámbito de Mediana Cerrada es donde más casos por estafa se dan y que algunos de los privados de libertad tienen en su poder teléfonos celulares satelitales que no se verán afectados por el bloqueo de la señal.
Trascendió que los aparatos fueron comprados en Panamá y que están siendo llevados a los líderes de la prisión para continuar con las estafas, por lo que la policía judicial mantiene las averiguaciones para evitar que se sigan dando esas actividades ilícitas.
DANZA MILLONARIA
DIARIO EXTRA tuvo conocimiento de que desde marzo del 2018 las autoridades les daban seguimiento a los funcionarios, pues al parecer por el traslado del recluso pagaron ¢50 millones.
Los trasladados estaban frenados debido a la orden sanitaria que existía por la pandemia, sin embargo luego se dieron y algunos habían cuestionado el accionar de la dirección de la cárcel La Reforma. El expediente administrativo del reo fue decomisado por el OIJ, que analizará si hubo omisión a la hora de analizar el vencimiento de las medidas cautelares para favorecer la ubicación en un régimen de menor contención.
