Diario Extra - Buseta lo aplasta al cambiarle llantas

El silencio y el dolor se apoderaron de toda una comunidad en Escazú, San José, al enterarse de que un trágico accidente le arrebató la vida a uno de sus más queridos vecinos mientras arreglaba una buseta, que le cayó encima y lo aplastó.
Se trata de Luis Francisco Calvo Venegas, de 51 años, confirmaron en el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Este señor vivía en la urbanización Manuel Antonio, en el distrito escazuceño de San Antonio, estaba casado, era padre de dos hijas y muy conocido entre sus vecinos por ganarse la vida en el transporte de estudiantes y servicios especiales, así como por ser caritativo.
La tragedia llegó para este hombre y su familia la mañana de este jueves, después de sacar sus tres busetas para darles mantenimiento, lo que con frecuencia lo veían hacer frente a su vivienda.
Al parecer la intención de Calvo era cambiar las llantas traseras de uno de las unidades, específicamente de la Mitsubishi placa BTL636, que está registrada a su nombre.
Para hacerlo estacionó el automotor a un lado de la vía pública, luego colocó unas gatas hidráulicas para levantarlo y se acostó en el suelo para retirar las llantas, sin embargo por razones que las autoridades investigan al parecer una de las herramientas colapsó, haciendo que el vehículo le cayera encima.
Esto provocó un fuerte estruendo que sacó a los lugareños de sus casas y al verlo prensado debajo del microbús de inmediato llamaron al servicio de emergencias, pero mientras llegaban los paramédicos corrieron para auxiliarlo.

INTENTAN AYUDAR

En ese momento el caos se desató entre los lugareños, quienes solo pensaban en la forma de liberar a Calvo, quien permanecía inconsciente debajo de la buseta. Incluso algunos unieron sus fuerzas para tratar de levantar el pesado automotor, pero los esfuerzos fueron inútiles.
Segundos después uno de los vecinos corrió a una propiedad cercana, donde se realizan unos trabajos de construcción. Ahí solicitaron ayuda al conductor de un backhoe, quien sin pensarlo dos veces se movilizó con la maquinaria hasta la escena.
Con la cuchara excavadora levantaron la parte trasera del automotor para liberar a Calvo, no obstante, pese a que le hablaron para que reaccionara, nunca respondió.
En ese momento llegaron los paramédicos de la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos, quienes lamentablemente confirmaron que las lesiones que sufrió en el accidente le causaron la muerte al busetero.
“A nuestro abordaje efectivamente hay un masculino en la parte trasera de un microbús. El vehículo se encontraba sin llantas, tenía una gata, la cual al parecer se falseó y los dispositivos de seguridad no fueron suficientes, por lo que el vehículo le cayó encima.
La llanta de repuesto en la parte inferior trasera fue lo que lo impactó en el tórax, el abdomen y la cadera. Cuando llegamos ya se encontraba fallecido”, explicó el cruzrojista Carlos Masís.
El socorrista añadió que aprovechando la presencia del backhoe se procedió a estabilizar la buseta, colocándole las llantas, para dejar la escena a cargo de los oficiales de la Fuerza Pública.
Estos últimos mantuvieron la respectiva custodia hasta que los agentes judiciales hicieron el levantamiento del cadáver.

CONSTERNADOS

Después de que los cuerpos de socorro confirmaran la muerte de Calvo, su esposa e hijas, quienes estaban a pocos metros, no pudieron contener las lágrimas, mientras que en el rostro de los lugareños se notaba la consternación que los embargó.
Algunos de los amigos más cercanos del busetero se reunieron en la escena y manifestaron que este tenía más de 25 años de vivir en esa urbanización e incluso además de transportar estudiantes a centros educativos brindó sus servicios a equipos de fútbol de la zona.
A Calvo lo recuerdan como un hombre que siempre fue humilde y muy atento con los menores de edad que transportaba.
Marco Cervantes Jiménez, vecino y allegado, manifestó que desde los 12 años conoció al ahora fallecido y actualmente le colaboraba con el mantenimiento de los automotores.
“Yo lo quería como si fuera mi papá. Era una excelente persona, muy luchador. Todos los días de la semana se le veía trabajando, nunca se le vio sin hacer nada. Fue un señor tan ejemplar que si preguntan en el barrio van a hablar maravillas de él”, expresó.
Agregó que un día antes de la tragedia Calvo pasó por su casa para decirle que necesitaba encerar el techo de una de las busetas y precisamente este jueves haría ese trabajo, pero lo recibieron con la lamentable noticia.
“Para eso venía, para ganarme una platita, ya que con él me ganaba algo diariamente porque yo era el chaineador de las busetas. Tengo muy buenos recuerdos de este señor, siempre fue una excelente persona”, concluyó.