La pandemia por Covid-19 no solo significó para los niños y adolescentes el tener que recibir clases en sus casas, sino que también representó un aumento del riesgo de sufrir quemaduras, incluso datos del Hospital Nacional de Niños (HNN) indican que, a junio de 2020, atendieron 176 menores con este tipo de lesiones.
Esto coincide con el comportamiento usual durante los periodos de vacaciones escolares, cuando una mayor permanencia en los hogares incrementa los casos de quemaduras.
El aumento de los pacientes quemados incluso ha llegado a colapsar los servicios de atención de la Unidad de Quemaduras del HNN en las últimas semanas.
Ante este panorama, en la Asociación Sobreviviendo a Quemaduras del Hospital y el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) lanzaron una campaña para lograr que en los hogares se prevengan este tipo de incidentes.
“El confinamiento ha provocado que las niñas y niños permanezcan en sus casas y ellos por naturaleza son curiosos, por lo que es responsabilidad de las madres, padres y cuidadores velar por su seguridad, evitando situaciones que pongan en riesgo su vida. Por eso estamos haciendo este llamado a la prevención y recordando medidas muy fáciles de poner en práctica para evitar las quemaduras”, explicó el doctor Carlos Siri.
Asimismo, Siri detalló que a inicios de 2020 esperaban que se dieran menos de 300 casos de niños quemados, pero por el comportamiento registrado hasta junio, proyectan atender por lo menos 350 niños o adolescentes, lo cual equivale a un aumento del 14% con respecto al 2019, año en que se dieron 309 casos.
La mayor incidencia de casos se ha dado en San José, Alajuela, Limón y Cartago.
El especialista indicó que, en caso de una emergencia por quemadura, se debe trasladar al menor a un centro médico para que lo valoren, pero lo más importante es no colocar remedios caseros en la zona afectada, tales como pasta de dientes, café o aloe.
De acuerdo con el galeno, en la mayoría de oportunidades las quemaduras en menores se dan por situaciones de descuido que se relacionan con líquidos calientes, cables y extensiones eléctricas en mal estado, baños a altas temperaturas, utensilios de cocina calientes, pólvora y alimentos muy calientes.
DESCUIDO
El descuido y la negligencia son los principales enemigos ante una situación de riesgo tanto en el abordaje de la lesión como en la prevención.
“Todos los adultos responsables de niños, niñas y adolescentes están obligados a tomar las medidas preventivas necesarias para disminuir o mitigar los riesgos de una quemadura, sino lo hacen, se podría estar ante un abuso por negligencia porque se priva a las niñas, niños y adolescentes de cuidado y protección al que tienen derecho”, dijo Gladys Jiménez, ministra de la Niñez y la Adolescencia.
En esa línea afirmó que el PANI trabaja en constante contacto con el HNNm quienes les envían el reporte cuando consideran que la situación de un menor debe judicializarse.
Ambas instituciones se unen y presentan cargos en el Ministerio Público, además de acompañar el proceso hasta que se dé una resolución.
¿QUÉ HACER?
Si un menor sufre una quemadura, coloque el área afectada en el chorro de agua fría por unos 15 minutos.
Retire todas las prendas que toquen el área afectada.
Cubra la quemadura con un paño o sabana limpia.
Llame al 9-1-1 o traslade al menor al centro médico más cercano.
PERIODISTA: Sharon Cascante Lizano
CRÉDITOS: Fotos: Archivo
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Viernes 04 Septiembre, 2020
HORA: 12:00 AM
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