La Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR) denunció que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) dejó de recibir ¢37 mil millones durante los cuatro meses de pandemia, debido al cierre de los locales comerciales y las medidas de restricción en algunas actividades.
“Son aportes que no se han podido dar por no tener libertad para trabajar, y el cálculo no incluye el aporte en la base mínima contributiva, es un golpe fuertísimo para la CCSS”, mencionó Julio Castilla, presidente de la CCCR.
El representante de la Cámara considera que el comercio debe volverse a abrir, debido a que los locales se prepararon con protocolos de salubridad.
“Los problemas no están en el comercio, los que se están contagiando no es el comercio, y la prueba es que nos han tenido 14 días encerrados y siguen aumentando los casos. La gente como tiene hambre debe salir de sus casas y sale a buscar a la calle dónde compra”, alegó.
Castilla adujo que la principal petición es que les permitan trabajar ya que cumplen los requerimientos de salud y la ciudadanía debe denunciar los locales que no cumplan las medidas.
En abril el presidente ejecutivo de la CCSS, Román Macaya, destacó que la institución dejaría de percibir ¢500 mil millones en sus ingresos regulares por los efectos de la pandemia.
“Debemos gastar más en insumos y al mismo tiempo recibimos menos por la crisis de empleo y la situación del país”, indicó en ese momento Macaya.
FINANZAS GOLPEADAS
No solo la CCSS se ve afectada con los comercios cerrados, sino que también los ingresos que debería tener el Ministerio de Hacienda por concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA) también muestran una caída libre.
La Cámara estima en $82 mil millones las pérdidas por IVA al mantener los establecimientos cerrados y exige al presidente Alvarado que escuche el llamado a tener un balance en las medidas.
Uno de los principales sectores afectados son los restaurantes, a quienes de manera restringida se les ha limitado atender al público. Este grupo representa 228 mil empleos, repartido en 19 mil locales.
“Hasta junio se cuentan 101.460 y el 75% de los negocios que están operando tuvieron que reducir la planilla. Cerca de un 71% de los negocios tienen más de 50% menos de ingresos, esos son insostenibles”, expresó Clemencia Palomo, de la Cámara Costarricense de Restaurantes (Cacore).
La representante de Cacore aseguró que las finanzas de los locales también inciden en el tema contributivo de la CCSS, debido a que hay menos personal disponible.
SINDICATOS PREOCUPADOS
La realidad de la Caja es un asunto que aqueja al país desde antes de la pandemia, la crisis financiera de la institución se menciona desde administraciones anteriores, principalmente por los miles de millones que le deben el gobierno y empresas de sectores privados al seguro social.
“Creemos que tiene que haber un refinanciamiento y que la condonación de las cuotas obrero patronal la va a desfinanciar más. Urge que se refinancie de la manera más inmediata, si no la institución va a llegar a ser técnicamente cerrada, y es un lujo que no se puede dar el país”, expresó Mario Rojas, de la Confederación de Trabajadores Rerum Novarum.
Para la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) el gobierno muestra una gran incapacidad en el manejo de la crisis financiera de la entidad y, en la situación actual de empleabilidad, consideran es el sector público quien está sosteniendo a la Caja.
En ese mismo sentido Martín Chinchilla, de la Unión Nacional de Empleados de la Caja y la Seguridad Social (Undeca), expresa que el problema radica en las promesas sin cumplimiento que ha hecho el gobierno sobre el pago de la deuda.
“El presidente lo que ha hecho es prometer que iban a presupuestar un depósito, cosa que es incierto como ha sido todo el tiempo. Afecta las condiciones del seguro social, en una etapa donde se requiere la mayor disposición de recursos”, comentó.
Según datos de la CCCR, mientras una tienda pequeña tuvo que despedir a 1 persona, en una grande cesaron hasta 17 colaboradoras.
En el caso de las reducciones de jornada, si en un local pequeño se recortaba a 3 personas, en uno grande les disminuían las horas a 64 empleados.
SINDICATOS OPINAN
• Albino Vargas, ANEP
“La Caja está en grave riesgo de quiebra. Malas decisiones gubernamentales y algunas con intenciones perversas en tal sentido. El empleo público con salario fijo, que es el 18% de la Población Económicamente Activa (PEA), está aportando en estos momentos casi el 50% de las finanzas que están sosteniendo a la Caja. El gobierno es incapaz de manejar el deterioro de la economía y, por eso, debe pedir ayuda”.
• Mario Rojas, CTRN
“Hemos advertido que la institución debe ser financiada y refinanciada, solicitamos que se pague la deuda del Estado y de las empresas con la Caja. No hay duda que la CCSS ha tenido que echar mano a recursos que tenía para otros fines”.
• Martín Chinchilla, Undeca
“Undeca fue enfático en señalar la importancia de que el gobierno asumiera con responsabilidad la atención de la pandemia, en función de la deuda que se tiene con la Caja. Ante las decisiones que tomó el gobierno que siguen afectando a la institución no nos extraña que siga agravándose la situación”.
CÁMARAS PIDEN BALANCE
• Julio Castilla, CCCR
“Necesitamos un debido balance, señor presidente, escuche a su equipo económico que se lo dice diariamente. A mediano y largo plazo va a ser mucho peor el daño que usted le va a ocasionar a este país por mantenernos cerrados, aun siendo disciplinados con protocolos”.
• Clemencia Palomo, Cacore
“Usted señor presidente debe entender cómo funcionan los negocios para poder tomar decisiones. No se resuelve el negocio de nuestro gremio con el domicilio, esto cada vez va en declive, en cierre”.
PERIODISTA: Mario Taboada
EMAIL: [email protected]
Martes 28 Julio, 2020
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA