Juan Gabriel Porras Salazar era el prófugo más buscado por las autoridades luego de que burlara la custodia que le mantenían los agentes de la Sección de Capturas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Chanica, como lo conocen, conducía un camión que cargaba algunos bienes ya que se estaba mudando de vivienda este lunes, cuando pasaba por la rotonda Juan Pablo II en La Uruca los oficiales le hicieron señal de alto, por lo que su libertad se acabó junto a su pareja, que no podía creer lo sucedido.
El escurridizo hombre protagonizó la fuga el pasado viernes 22 de mayo cuando el vehículo policial se detuvo para bajarlo por la puerta trasera y presentarlo ante las autoridades correspondientes en Pavas, lo cual aprovechó para salir huyendo esposado sin que los investigadores al parecer se percataran a tiempo.
Porras Salazar cruzó el bulevar como alma que lleva el diablo y posteriormente se lanzó por una pendiente con maleza que da al río María Aguilar. El escape se dio bajo un fuerte aguacero, mientras los agentes judiciales corrían tras él.
En minutos, la zona conocida como Bajo Los Ledezma, en La Uruca, se llenó de oficiales de la Fuerza Pública, de la Policía Municipal y del OIJ, quienes rastrearon varias horas las márgenes del crecido río, la parte trasera de los caseríos y debajo del puente, sin poder ubicarlo.
Chanica, quien había sido fotografiado por los propios agentes tras su captura, registraba la última dirección en el precario Bribri en Lomas del Río, Pavas, donde el OIJ montó una vigilancia para intentar dar con el escapista.
