Diario Extra - Se esconde de policía en cielorraso por 17 horas

A un hombre de apellidos López Umaña, de 25 años, lo capturó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) tras 17 horas de permanecer atrincherado dentro de una vivienda.
El sujeto estaría vinculado en una balacera que se produjo en Cuatro Reinas de Tibás y dejó como resultado a dos personas heridas.
Minutos antes de las 10 a.m. el Servicio Especial de Respuesta Táctica (SERT) llegó a Cinco Esquinas de Tibás para -con la autorización de un juez y la presencia del fiscal adjunto Mauricio Boraschi- ingresar a la casa ubicada detrás de la iglesia.
Los agentes ordenados en fila india entraron al inmueble donde lanzaron un aturdidor, ya que no se tenía clara la cantidad de personas que podían estar dentro y tampoco si estarían armadas.
El lugar parecía vacío, pero los oficiales hicieron una revisión más profunda e incluso desde afuera, con la ayuda de una escalera, subieron al techo de la propiedad.
Fue así cómo lograron ubicar al sujeto en el cielorraso y lo sacaron para bajarlo con el fin de que respondiera por qué había actuado de esa manera al percatarse de la presencia policial.

LO ENCONTRADO

Pero al ahora detenido no fue lo único que las autoridades encontraron, sino que la vivienda estaba llena de sorpresas, por lo cual saltaron más dudas.
Tras asegurar la escena por parte del SERT, al sitio arribaron agentes de la Sección de Inspecciones Oculares y Recolección de Indicios con el propósito de hacer una minuciosa revisión.
En la cochera halaron un vehículo Nissan Tiida Blanco, el cual presentaba varios impactos de bala, por lo que se cree tuvo participación en la balacera de Cuatro Reinas.
Los agentes realizaron la respectiva consulta y el vehículo se reportó robado el 29 de junio anterior en Pavas. Lo sustrajeron por el método del descuido.
Además encontraron varios rastros de sangre tanto dentro del automóvil y también en la casa, pero lo curioso es que el hombre no presentaba ningún tipo de herida.
Esto refuerza la teoría de participación del automotor en la lluvia de plomo y que uno de los heridos habría llegado hasta este punto, pero luego en otro carro lo trasladaron a un centro hospitalario.
Como si lo anterior no fuera poco, dentro de la estructura decomisaron al menos ¢600 mil en efectivo, cuyo origen no se tiene claro, pero las autoridades sospechan que sería producto del narcotráfico.
Tras cerca de 4 horas de labores dentro del inmueble los agentes procedieron a la extracción del Nissan para trasladarlo hasta los laboratorios del OIJ y terminar de hacer la inspección que revele más detalles sobre lo sucedido.
Respecto al detenido, los judiciales lo remitieron a los Tribunales de Justicia para ponerlo a la orden del Ministerio Público como sospechoso del delito de receptación y ahora se deberá definir su situación jurídica.

GRAVES

Respecto a las personas heridas en Cuatro Reinas, trascendió que quien estuvo en la vivienda junto al atrincherado sería un menor de 16 años que recibió varios impactos de bala, uno de ellos en la cabeza, dos en el abdomen y uno en la pierna.
Este adolescente sería ocupante del carro robado y tras meterlo a la casa chorreando sangre lo desplazaron hasta el Hospital Calderón Guardia, donde se debate entre la vida y la muerte.
Al segundo sujeto herido, que era uno de los objetivos de los gatilleros, lo identificaron como de apellido Espinoza, de 23 años. A él lo llevaron al Hospital México donde permanece bajo cuidado médico.
Ambos masculinos se mantienen bajo custodia policial, ya que en su momento los indagarán las autoridades para que den su versión de los hechos y así continuar la pesquisa que permita determinar qué sucedió a ciencia cierta.

BALACERA

Todo lo que antecede a la acción judicial de este jueves se remonta al pasado miércoles, cuando a la 1 p.m. frente al Mega Súper de Cuatro Reinas se alertó sobre un intercambio de disparos entre varios hombres.
Ahí dos sujetos estaban al parecer a bordo de una motocicleta en la vía pública cuando se les acercó un automóvil blanco en que viajaban al menos tres pistoleros, quienes sin decir ni media palabra sacaron armas de fuego y comenzaron a disparar contra los motorizados.
Tras la lluvia de plomo una llamada entró a la Fuerza Pública indicando que en Cinco Esquinas un carro con los vidrios quebrados había ingresado a una casa en actitud sospechosa.
Por lo tanto arrancó un amplio despliegue policial y ubicaron el vehículo en la vivienda mencionada, por lo que de inmediato lo custodiaron.
Cerca de las 4 p.m. del miércoles el sujeto que ahora está arrestado aparentemente no se percató de que lo rodeó la ley y decidió salir, pero al abrir el portón vio a los oficiales y se sorprendió.
De inmediato se dispuso a cerrar las puertas, pero los policías tomaron la estructura desde afuera para evitarlo hasta el punto que se produjo un pequeño forcejeo y el hombre se dio por vencido para atrincherarse en el inmueble durante 17 horas.
Ahora el caso continúa en investigación para determinar si hay más personas involucradas y quiénes fueron realmente los atacantes, así como conocer el móvil del tiroteo.