Los exportadores costarricenses siguen registrando pérdidas a pesar de la apertura de fronteras debido a la nueva realidad comercial.
Así lo denuncio Randall Benavides, presidente de la Cámara de Exportadores e Importadores de Productos Perecederos.
“El país no está para perder negocios y trabajos. Hay medidas que adoptaron los otros países por reciprocidad y nos están afectando”, explicó.
A manera de ejemplo, manifestó que los nicaragüenses, hondureños, y panameños no permiten que los costarricenses recarguen en esos países, es decir que los contenedores deben regresar a nuestro país vacíos una vez que han dejado los productos.
“Ellos permiten que entren, pero deben venir vacíos. Antes permitían meter una carga, ya no, y parte del negocio era juntar y rejuntar carga”, comentó.
En su caso particular usaba cajas reutilizables, que ahora está perdiendo porque no le permiten traerlas de vuelta, deben quedar en el país hacia el que se dirige la exportación.
“Eso a mí me incrementa el costo y sé que hay empresarios que están igual. Estamos como país perdiendo competitividad, porque en otros países entre ellos pueden entrar el comercio abierto, nosotros no”, acotó.
Además, el acuerdo para que las empresas puedan recibir cargas peligrosas, frías o a granel requiere de todo un protocolo.
Hay que hacer un reconocimiento, pedir el permiso al Ministerio de Comercio Exterior (Comex) y ellos a su vez a Salud, que manda unos inspectores a hacer una auditoría. Entonces el proceso, según las empresas no resulta para nada ágil.
“Eso de pedir permisos no se dijo en ningún lado. Yo veo positivo que el tráfico internacional camine, pero me preocupa la competitividad, nos están metiendo en una burbuja del costo. La situación está enredada, se están encareciendo las exportaciones, estamos perdiendo mercado”, dijo.
A este problema se suma el de los almacenes fiscales porque dejar ahí la carga agrega un costo que antes no existía.
Laura Bonilla, presidenta de la Cámara Nacional de Exportadoras (Cadexco), manifestó que hay que tener paciencia porque hay complicaciones de logística que con el tiempo deberían irse arreglando. “Hay que buscar soluciones para que todo vaya fluyendo”, recalcó.
Antes de la apertura de fronteras las pérdidas reportadas rondaban los $80 millones solo para el caso de Costa Rica, luego de que las fronteras estuvieron cerradas por cerca de dos semanas.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Sábado 06 Junio, 2020
HORA: 12:00 AM
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