Costa Rica paso a ser una economía con alto riesgo crediticio. Es lo que significa el hecho de que Moody´s ponga al país en una perspectiva negativa.
Anteriormente se encontraba en B2 estable.
Para la agencia el riesgo país aumentó ante las mayores presiones de financiamiento que se originan con la llegada del Covid-19.
Ahora, inversionistas y organismos internacionales lo pensarán dos veces antes de darnos recursos. El panorama es el mismo que anticipaban los economistas si no se aprobaba la reforma fiscal.
En su comunicado, Moody´s hace referencia a la inminente necesidad del gobierno de recurrir a préstamos para financiarse. Algo que no es visto con buenos ojos.
Además, menciona que se prevé una contracción de la economía del 4% para el 2020 y un repunte para 2021 con un 3%, es decir que hasta en un año volveríamos a un nivel similar a como veníamos en el 2019 antes del Covid-19.
Otra mala noticia es que se estima un déficit fiscal que rondaría el 9,7% del Producto Interno Bruto (PIB) y no es para menos, pues el gobierno anunció recientemente un faltante de 900 mil millones de colones en ingresos.
Esta es la segunda vez que la agencia baja la calificación al país en un plazo corto. En febrero paso de B1 a B2 y ahora a negativa.
Moody´s también hace énfasis en que el nivel de endeudamiento es muy alto, y esto se asocia con la reciente declaración del Ministerio de Hacienda de que estaríamos alcanzando una relación del 67% del PIB.
Adicionalmente, se pone en duda la consolidación fiscal del país, debido a que las condiciones cambiaron y las señales indican que esa ruta ya no es tan sólida como se preveía cuando se aprobó la Ley para el Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
Al cierre de edición, el Ministerio de Hacienda no había emitido ninguna reacción al respecto.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Miércoles 03 Junio, 2020
HORA: 12:00 AM
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