El presidente del Brescia Massimo Cellino advirtió este jueves que estaba dispuesto a declarar la baja de su equipo en caso de reanudación de la temporada de la Serie A, en plena pandemia de coronavirus.
Todos los partidos en Italia fueron suspendidos desde comienzos de marzo hasta el 13 de abril debido a la propagación del coronavirus, que ha causado más de 13.000 muertos en el país.
En esas condiciones, "para mí, volver a jugar sería una pura locura", afirmó Massimo Cellino a la Gazzetta Dello Sport.
"Si nos obligan a ello, estoy dispuesto a no alinear al equipo y a perder los partidos 3-0 por incomparecencia, por respeto a los ciudadanos de Brescia y a sus familiares que ya se han ido", añadió el presidente del club de Lombardía, región del norte de Italia y foco principal de la epidemia en la península itálica.
Estas declaraciones se producen después de las del presidente de la Federación Italiana, Gabriele Gravina, quien se mostró determinado a que la temporada llegase a su fin, aunque tuviera que finalizar en agosto.
"Aquí tenemos camiones que transportan muertos, estamos en el centro de la epidemia", recordó Cellino.
"Me es indiferente el descenso. Hasta ahora lo hemos merecido y yo soy asimismo el culpable", añadió el dirigente, cuyo club ocupaba el último puesto de la tabla en el momento del parón en la fecha 26ª.
"Si la UEFA quiere hacer cualquier cosa útil, que envíen botellas de oxígeno o respiradores a Brescia, nosotros se lo agradeceríamos", clamó.
En cuanto a un nuevo aplazamiento del campeonato, el presidente del Brescia mostró también su opinión: "Nosotros no podemos aplazar nada, la temporada tiene una fecha límite el 30 de junio con la presentación de los presupuestos de los clubes y el final de los contratos de los jugadores".
"En todos los casos, los jugadores saldrán de 45 días de inactividad total, es necesario al menos un mes de entrenamientos sólo para que recuperen la forma", indicó.
