El atún enlatado es uno de los productos más versátiles con el que se cuenta en las casas, y son en muchas oportunidades un salvatandas cuando se trata de encontrar algo rápido con lo que acompañar ya sea el almuerzo.
Por otra parte es consabido que tiene aportes nutricionales importantes tal es el caso de las vitaminas, minerales y el alto contenido en proteínas, pero a pesar de eso su alto contenido en ácidos grasos Omega 3 es un gran aliado de la salud cardiovascular y combate la hipertensión y los altos niveles del colesterol.
No obstante la parte negativa viene cuando nos damos cuenta que el atún es un producto altamente procesado y tiene un gran inconveniente: su alto contenido en mercurio.
El mercurio es un metal pesado que por distintos procesos industriales termina en mares y oceános, este elemento se encuentra de forma natural en la atmósfera, pero también su naturaleza lo hace pegarse naturalmente a la carne del atún.
La problemática viene porque cuando los seres humanos ingerimos el atún con él ingresa a nuestro organismo el mercurio, el cual no es nada sencillo de excretar y por el contrario actúa como un neurotóxico que actúa sobre el sistema cerebral y nervioso de forma casi imperceptible para nuestra realidad.
Es por lo anterior que la ingesta de atún se recomienda poco para niños y mujeres embarazadas, poblaciones altamente vulnerables a su ingesta, y a los demás bajar el consumo a una vez por semana, pero siempre con consideraciones como lavar el atún con agua y mezclarlo además con cítricos y vegetales para aminorar su impacto negativo en el cuerpo humano.
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Sábado 07 Marzo, 2020
HORA: 11:49 AM
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