Dos mujeres decidieron interponer una denuncia penal en contra de un oficial de la Fuerza Pública de apellidos Alcázar Vargas por supuestamente haberlas agredido y a una de ellas incluso tocarle sus partes íntimas, hechos que se habrían dado en una propiedad privada.
Todo se remonta al pasado sábado 29 de febrero, cuando en la Candelaria de Palmares, las ofendidas Fainier Vargas y su sobrina Verónica Hidalgo se dirigían a la finca de Mireya Vargas, hermana de la primera y tía de la segunda, a buscar unos plátanos que necesitaban para hacer en el almuerzo.
“Cuando íbamos vimos que estaba estacionada afuera de la propiedad de a la par una patrulla de Fuerza Pública donde estaban Alcázar Vargas y una compañera policía”, indicó Hidalgo.
En ese momento el hombre, con su uniforme oficial y el arma de reglamento, comenzó a llamar a su esposa a gritos para que saliera, ella también es hermana de Fainier y Mireya (acusado y acusadora son cuñados), los cónyuges comenzaron a insultarlas e incluso amenazarlas de muerte.
Pese a esto las dos mujeres continúan su camino e ingresan a la propiedad de Mireya para culminar con sus planes de alistar el almuerzo.
De acuerdo con la Fainier Vargas, “cuando ingresamos a la propiedad de mi hermana, se vinieron a retarnos a pelear, él y la esposa, luego llegó el hijo y a mí me agarró el policía con su compañera”.
Mientras esto pasaba, Verónica también era agredida por su propia tía y esposa del funcionario policial, así como por su primo, quienes le dieron una verdadera golpiza, pese a que ya estaba tendida en el suelo.
“Yo no sé cómo me logré soltar y me fui a proteger a Verónica, ellos me golpeaban por la espalda hasta que me volvieron a agarrar e incluso me esposaron, sin importarle que estábamos en una propiedad privada”, agregó Vargas.
DETENIDA
Incluso pidieron refuerzos para frenar la supuesta agresión, por lo que llegaron dos oficiales más que también ingresaron la propiedad privada para detener a la mujer.
“Me pusieron las esposas y dijeron que me iban a aplicar la ahogadora, ese hombre me restregó sus partes nobles en la espalda y me respiraba en la oreja”, recordó en medio del llanto Vargas.
Es así como terminaron levantándola y montándola en una patrulla para llevársela detenida, permaneció alrededor de cinco horas sin que se presentara algún tipo de cargo en su contra.
Tanto al momento de la detención como durante el traslado los oficiales de Fuerza Pública le habrían tocado los senos y sus partes íntimas, lo que repudia la mujer y por eso pide que se haga justicia.
“Cuando estaba ahí me dijo que iba a conocer lo que era un calabozo y le vamos a dar comida, pero nosotros le tiramos mocos, saliva y semen, la revolvemos y usted se la come”, denunció Vargas.
LARGA HISTORIA
Aunque las mujeres hasta ahora se atreven a denunciar la agresión de la que fueron víctimas, lo cierto del caso es que es una situación que ya llevan años sufriendo con el oficial y cuñado.
“Él siempre nos ha acosado y nos dice que nosotras debemos ser mujer de él, incluso cuando me lo topo en la calle me dice que a quién le pido permiso para poder salir”, explicó entre lágrimas Vargas.
Pese a ser esposo de una hermana, él insiste en que deben de complacerlo y obedecerlo, ignorando los clamores de respeto que cuando se presenta la situación se dan.
“Él dice que nosotros le pertenecemos y mi hermana solo dice que nosotros tenemos la culpa porque andamos provocando a los hombres”, agregó, siendo una de las víctimas del agresor.
DENUNCIA
Es por esto que este martes junto a su abogado Edgar Rodríguez, las dos mujeres llegaron hasta la Medicatura Forense para presentar las respectivas denuncias por este caso.
“Es un abuso de autoridad, podría configurarse delito de abusos sexuales y tocamientos, porque ella manifiesta que los oficiales en situaciones comprometedoras le tocaron los senos y sus partes íntimas. Es un caso muy grave donde funcionarios públicos investidos con autoridad ingresaron a una propiedad privada”, señaló Rodríguez.
Incluso cabe destacar que Fainier Vargas cuenta con un poder para poder actuar en la propiedad de su hermana Mireya, por lo que las denunciantes en ningún momento hicieron nada ilícito.
Además, ellas van a proceder a presentar el caso ante asuntos internos del Ministerio de Seguridad Pública, para que sean investigados los tres oficiales involucrados en la situación.
“La administración pública y la seguridad pública no pueden tener funcionarios de este tipo, jamás, el pueblo se merece funcionarios sanos, honestos, transparentes y dispuestos a servir al pueblo”, concluyó Rodríguez.
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CRÉDITOS: Fotos Francisco Herrera
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Miércoles 04 Marzo, 2020
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