La Cámara de Exportadores e Importadores de Productos Perecederos considera que con la cebolla podría estar ocurriendo algo similar a lo que pasó con el aguacate.
Manrique Loáiciga, vicepresidente de la Cámara, manifestó que mientras el precio de la cebolla está por las nubes, el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) tiene frenados los permisos de importación sin justificación alguna.
Indicó que esto contraviene una resolución de la Sala Constitucional y constituye una restricción no arancelaria, que solo viene a favorecer el contrabando.
DIARIO EXTRA intentó conocer el criterio del ministro de Agricultura, Renato Alvarado, pero no respondió a los mensajes al cierre de la edición. Tampoco lo hizo el viceministro Marlon Monge.
Por su parte, el director del SFE, Fernando Araya, indicó que se encuentra fuera del país. Según manifestó, los volúmenes de requisitos fitosanitarios se han aumentado considerablemente, tanto en solicitudes, como en emisiones.
“Si se refieren a algún caso específico habría que ver a qué se podría deber”, comentó.
Los precios del Cenada indican que el kilo de cebolla anda por un precio cercano a los ¢1.600 el kilo y de acuerdo con Loáiciga eso es casi un 400% más.
“El problema es que la sequía dañó la cebolla nacional y hoy hay un déficit real que el Estado no permite llenar con la importación. Prefieren favorecer el contrabando y que los precios están por las nubes para el consumidor”, dijo.
Advirtió que para enero más bien se podría dar un desplome del precio, afectando a los productores locales porque es posible que estos permisos en cola salgan tardíos.
“Esa importación en enero se va a junta con la cosecha nacional. El SFE está usando una barrera no arancelaria como hizo con el aguacate. Tienen dos meses de atraso en la entrega de los permisos cuando deberían darlos en ocho días. Otra cosa que no entiendo es por qué la Dirección es quien debe aprobar esos permisos cuando no es un órgano técnico”, señaló Loáiciga.
Manifestó que con esta posición del SFE, el país también pierde unos ¢200 millones en impuestos por el internamiento de la cebolla y en la recaudación del impuesto sobre la renta.
“Es muy sencillo, si se está dejando de importar de dónde está viniendo la cebolla, hemos hechos denuncias sobre el contrabando y solo nos dicen que las van a revisar cuando aquí se mueven cientos de toneladas al mes”, recalcó Loáiciga.
DIARIO EXTRA consultó a Gerardo Aparicio de la Asociación Horticultores del Irazú (Ashori) su criterio con respecto a este tema. El productor nacional indicó que el precio en campo ha bajado un poco, pero no así el del consumidor.
Este confirmó que hay un faltante en la producción local para satisfacer el consumo nacional. Eso significa que queda un pequeño hueco.
“Eso deberían cubrirlo las importaciones, pero hay un problema de contrabando”, dijo Aparicio.
Además, hay dos problemas adicionales, a nivel mundial hay un déficit en la producción de cebolla y en Costa Rica, los problemas climáticos han afectado la producción. El problema actual responde a un tema de sequía.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
CRÉDITOS: Fotos: David Barrantes
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Jueves 21 Noviembre, 2019
HORA: 12:00 AM
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