Un triángulo amoroso entre una defensora pública de apellido Chinchilla, un juez de la República de apellido Tapia y una entrenadora personal apellidada Angulo, ha ocasionado un polvorín en el Colegio de Abogados y en el mismo Poder Judicial.
Esto debido a que se filtraron unas fotografías de contenido sexual que habrían desatado un intenso pleito personal y legal entre los involucrados, sin embargo, las imágenes explícitas no serán publicadas.
El caso llegó hasta El Periódico de Más Venta en Costa Rica y es parte de una denuncia por supuesta agresión que podría estar bajo la lupa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Presidencia de la Corte, según lo confirmó la propia defensora pública, pues al parecer también hay una extorsión de por medio.
Es más, la mujer que conversó con DIARIO EXTRA la semana pasada aseguró que teme por su vida, por la de quien identificó como su esposo, que sería el juez, así como por la de sus hijos.
Fue explícita en decir que “todo el aparato judicial” investiga quién busca sacarle dinero a cambio de las candentes fotos del juez y la entrenadora personal haciéndose cariño en las instalaciones del Colegio de Abogados.
“TRÍO AMOROSO”
Según supo este medio de comunicación, todo se genera cuando la defensora Chinchilla descubre que en apariencia su compañero sentimental, pues de acuerdo al Registro Civil no están casados, tiene una relación amorosa con una joven que se dedica al acondicionamiento físico en las instalaciones del Colegio de Abogados.
Parece ser que la entrenadora personal conoce al juez en el gimnasio de dicho colegio y comienzan una relación de más que amigos, según puede verse en las fotografías que llegaron a este medio provenientes del correo [email protected], y esto desata la bronca.
El juez Tapia pertenece a la junta directiva de ese colegio profesional y trascendió que tuvo a su cargo el visto bueno de la contratación de la entrenadora personal.
Tras consultar fuentes cercanas al gremio de abogados, se conoció que ambos se paseaban con tranquilidad en las instalaciones del lugar de manita sudada.
Es más, el compendio de fotos los muestra dormidos en el sillón de una oficina, luego ambos aparecen posando para un selfi, ella lleva la camiseta oficial del colegio, mientras que Tapia luce muy sonriente.
Una tercera foto es de contenido sexual, muestra a una mujer desnuda con un antifaz en sus ojos, hincada en el piso y aparentemente amarrada de las manos. Los zapatos y otras prendas están desperdigadas en el aposento.
Una cuarta imagen deja ver lo que serían unas partes íntimas masculinas.
Al parecer, la relación habría llegado a su fin hace un par de semanas, cuando ambas mujeres se enfrascaron en una disputa por el juez.
Lo peor es que alguien habría robado el celular de la preparadora del que tomó las fotos comprometedoras para difundirlas en redes y correos electrónicos.
La entrenadora personal fue despedida de su puesto por la junta directiva del Colegio de Abogados sin que mediara mayor explicación, esta situación ha causado malestar en algunos miembros del ente colegiado, pues aseguran que hubo negligencia y abuso de poder de Tapia.
Se trató de conocer la versión de ambos, Tapia y Angulo, pero no fue posible localizarlos.
CONFIRMA EXTORSIÓN
El Periódico de Más Venta en Costa Rica contactó vía telefónica a Chinchilla, quien aseguró que por motivos de seguridad y por asesoría del OIJ el teléfono suyo cuenta con un sistema que graba las llamadas.
“Actualmente mi esposo y yo estamos siendo extorsionados a raíz de la información que usted tiene, se están usando correos falsos, chats de WhatsApp y llamadas para pedir dinero, estamos muy afectados por la situación por lo que existe una investigación debido a lo delicado que es. El OIJ está detrás de eso, hay una persona que nos está extorsionando, sabemos que usted recibió un correo, necesito saber quién está utilizando mi nombre falsamente para hacerme daño, es muy doloroso e incómodo hablar de eso, somos víctimas de un delito”, relató la mujer.
“No puedo dar detalles de la investigación, no conozco a Angulo, no sabría cómo explicar lo de las fotos, a nosotros nos piden dinero por esa información, nos mandan mensajes de perfiles falsos. No he enviado ningún dinero, es una persona que se hace pasar por mí, suplantando mi identidad, quisiera tener las respuestas, si le doy información podría entorpecer el caso, los delincuentes tratan de intimidarnos, no puedo decirle cuando inició la situación”, explicó.
