CONSULTA: Este tiempo en que todos celebran el Día de la Madre con tanta alegría, no es mi caso, mi madre y yo nunca no hemos llevado bien, mi mamá no fue buena conmigo, desde la niñez siempre hubo abuso físico y psicológico de parte de ella y eso aún lo resiento, además su forma de ser es muy difícil y no ha permitido restaurar o tener una buena relación ahora que soy adulta, ¿qué puedo hacer?
RESPUESTA: Para muchas personas, este mes de la madre es incómodo, triste o difícil, ya sea que no tienen madre porque esta los abandonó o descuidó en varias formas, o tal vez porque les abusó con agresión física y psicológica durante mucho tiempo de sus vidas, o quizá nunca la conocieron ni supieron quién era, otros tuvieron una madre alcohólica, drogadicta, y estas prefirieron los vicios que a sus hijos.
Es doloroso pues se lloran y se sufren varias cosas, como el haber experimentado dolor de lo que esa madre les hizo, o el nunca haber tenido una relación hermosa y significativa con ese ser llamado madre, o aquel vacío de no haber jugado a los carritos o a las muñecas con mamá, o el haber reído porque te hace cosquillas, o el que ella se sintiera orgullosa por el primer gol que marcaste o el haber dibujado una mamita con crayones y llevársela para mirar su cara de felicidad, el no haber sido aconsejado en manera amorosa, el dormirse abrazados, el crecer junto a ella, y así llegar a la adolescencia y a la adultez en su compañía, o que estuviera presente en las graduaciones o que desfilaras con ella en el día de tu boda y, más duro aun, cuando se sabe que no va estar ahí nunca, para todo lo que aún falta por vivir. Y que cada Día de la Madre es lo mismo, un regalo incómodo de dar con un abrazo y un beso.
Yo sé que todos esos abrazos que nunca fueron duelen, que hasta en algunos casos tuvieron madres que prefirieron una pareja que a ellos, y terminaron mendingando cariño y tiempo de su madre.
Decide hoy el no permitir que todo eso que ocurre o que ocurrió te convierta en una persona amargada e infeliz con un corazón herido, o que inconscientemente te castigues a ti mismo con malas conductas y malas decisiones, tú no merecías ese trato, por eso no permitas que lo que esa persona te hizo o te esté haciendo o te haga en el futuro te destruya, eso sería ser víctima y tú estás para algo más que eso.
Te motivo a superarlo, porque si te estancas ahí, en la herida, en el rencor, pasarás sufriendo siempre y un corazón herido crea raíces de amargura, así que sigue adelante, perdona, supera y crece. Perdona no para que ella cambie, sino para que tú sanes, para que tú no repitas patrones y para que cuando tengas tu hogar, sea sano.
*Consejero familiar
Consultas y charlas a:
[email protected]
Espectáculos
Mi mamá no fue muy buena conmigo
Parejas, hijos y algo más
