Un video que muestra a cinco privados de libertad realizando llamadas desde celulares aparentemente para estafar personas en el exterior deja al descubierto la mafia que opera tras las rejas.
Los reclusos son del Centro de Atención Institucional (CAI) Jorge Arturo Montero, conocido como La Reforma, ubicado en San Rafael de Alajuela.
En el centro de llamadas clandestino cada uno está en su propio espacio, con dispositivos móviles, auriculares y hasta con una libreta en que anotan los datos personales que les facilitan las víctimas.
De acuerdo con Pablo Bertozzi, director de la Policía Penitenciaria, aunque la grabación salió a la luz pública este martes, se logró determinar que fue hecha hace cuatro meses aproximadamente, pues algunos de los privados de libertad que ahí aparecen ya no se encuentran en ese ámbito de dicha prisión, no están institucionalizados o fueron trasladados a otras cárceles.
En las imágenes se puede ver a la persona que graba enfocando a sus compañeros de celda, incluso se observa a uno de ellos fumando lo que parecer ser marihuana, así como un cuaderno con datos de los afectados.
“Aquí tenemos al Chapulincito robando”, “Aquí hay otro compa pulseando la platica del día de hoy”, expresa.
Segundos después se escucha decir a otro de los reos: “En este caso, don Rodolfo, nuestra preocupación sería el dispositivo que usted tiene que se reportó como extraviado, en este momento el que se encuentra activo es el que tiene la señora Laura”.
A los sospechosos los identificaron con los apellidos Segura, Madrigal, Cordero, Tencio y Garita. Ellos cumplen condenas por delitos como homicidio, robo, violación y venta de drogas.
FALTAN RECURSOS
Tras observar las imágenes, algunas personas se cuestionan cómo es posible que todo esto ocurra desde el interior de una prisión aun habiendo presencia policial.
Según explica Bertozzi, los uniformados no pueden estar dentro de las celdas y las visitas que se hacen son aleatorias, además en estos espacios no se pueden instalar cámaras porque la ley no lo permite, por lo cual tratan de controlar lo que ocurre dentro con otras medidas.
“Ahí dentro no hay oficiales, ellos están en los abanicos en unas puertas de ingreso, dentro de los dormitorios no es posible, las visitas que se hacen ahí son de carácter aleatorio, no podemos tener la capacidad humana suficiente para poder tener control de esos lugares. Para mí si logramos inhibir la señal de celulares en los centros penales, vamos a afectar esa actividad de manera significativa”, dijo.
Por otra parte, ante la consulta sobre cómo siguen metiendo celulares a las cárceles, pese a las revisiones previas que hacen al ingreso de los visitantes, Bertozzi detalló que a diferencia de los centros penales de otros países, donde hay mayores restricciones, en Costa Rica las políticas son más abiertas y los privados de libertad tienen más opciones para socializar.
“Nos toca en el marco de esa realidad prepararnos, pero también somos una institución pobre en materia de recursos, entonces nos es muy difícil poder contar con toda la tecnología, por eso la importancia de que si la ley les confirió a las operadoras la responsabilidad de bloquear la señal que ellas lo hagan y que lo hagan bien”, sostuvo.
Bertozzi también reconoció que esas estafas no solo se ejecutan desde La Reforma, ya que en ocasiones han detectado otras prisiones, como la de Puntarenas, en que los reclusos aprovechan la mínima oportunidad para lucrar con este delito.
Cuando se descubre que están cometiendo un delito como este lo que procede es que asuman las consecuencias legales y administrativas, esas últimas serían la pérdida de beneficios carcelarios a los que aspiran.
“El sistema penitenciario ofrece oportunidades para la inserción social de las personas privadas de libertad, muchas se acogen realmente a esas oportunidades y buscan cambiar su vida para reintegrarse a la sociedad de manera estricta. Pero lamentablemente hay otros tantos que no tienen ningun interés por hacer un uso de esas oportunidades que el sistema les da”, dijo.
La Policía Penitenciaria fue clara en que también analizarán la actuación de los oficiales de este cuerpo policial que tienen a cargo la custodia de la celda en que se encontraban los sospechosos.
BLOQUEO
Tras ser aprobada en segundo debate el 16 de agosto del 2018 se firmó la Ley 9.597, cuyo objetivo es combatir las estafas que se cometen desde centros penitenciarios mediante el bloqueo de la señal celular.
Las empresas de telecomunicaciones del país tienen hasta abril de 2020 para implementar las soluciones y cumplir con esto.
Bertozzi aseguró que desde la semana pasada los proveedores de servicios visitan los centros penales para hacer los análisis tecnológicos y determinar cuál método deben emplear, preparar el diseño y definir a quién contratarán.
Asimismo Marcia González Aguiluz, ministra de Justicia y Paz, aseguró que no permitirá este tipo de acciones delictivas en ninguna prisión, por lo que ordenó la inmediata investigación del caso.
“Lo ocurrido nos reitera la importancia de la implementación del bloqueo de la señal celular. Por eso hago un llamado a los operadores de telecomunicaciones para que esto se pueda lograr lo antes posible. Es necesario llevarle tranquilidad a la ciudadanía, resolviendo esto cuando cuanto antes”, expresó.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Justicia, desde 2015 se contabilizan 14.847 dispositivos de este tipo.
Solo en lo que va de 2019 en el ámbito D de La Reforma se han decomisado 145 celulares, 87 de ellos en el pabellón donde se hizo el video.
Además, otros 1.918 artefactos electrónicos han sido incautados en todas las prisiones del país.
PERIODISTA: Mónica Matarrita Mora
EMAIL: [email protected]
Miércoles 14 Agosto, 2019
HORA: 12:00 AM
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