María Victoria Salas Ruiz denunció al Estado después de que Ernesto Jinesta, presidente de la Sala Constitucional, la llamó por teléfono para recomendarle que se jubilara por un problema de salud que le impidió tener contacto con aires acondicionados, ventiladores y polvo, lo cual la hizo pedir el traslado de Guápiles a San José.
Precisamente ya salió la resolución del proceso que interpuso la funcionaria, la cual declara con lugar su demanda.
“Se ordena anular lo dispuesto por el artículo LXXXII del acuerdo tomado por el Consejo Superior del Poder Judicial en la sesión 55-17 del 6 junio del 2017.
Se condena al Estado al pago de los daños y perjuicios patrimoniales causados a la actora, con motivo de salarios que dejó de percibir.
Se ordena reinstalar a la actora en el puesto como jueza supernumeraria del Centro de Apoyo, Coordinación y Mejoramiento de la Función Jurisdiccional que venía ocupando con motivo de su readecuación”, ordena el fallo.
Precisamente DIARIO EXTRA intentó contactar a la jueza y su abogado, pero al cierre de edición no fue posible.
Recordemos que el caso se remonta a 2016, cuando a Salas le llegó un oficio donde le indicaban que no podía trabajar en la Sala Constitucional, donde aplicó.
“Jinesta me llama a mi celular y me dice que la plaza es de la presidencia de la Corte y que no podía hacer nada, le dije que el tema lo ve el Consejo Superior y me dijo: ‘¿Usted no ha pensado jubilarse permanentemente?’. Le respondí que solo necesito condiciones.
Dos horas después me llama la esposa de Jinesta, que es la jefa de mi hermano, me dice que tenga cuidado lo que voy a poner en el recurso de amparo que podría comprometer a Ernesto, a ella y la familia. Le dije que era solo de condiciones, me dijo que me acordara que mi hermano trabajaba con ella”, recalcó.
De acuerdo con la funcionaria, en cuatro semanas la jubilaron, por eso demandó, pero el fallo le dio la razón y ahora deben reinstalarla.
PERIODISTA: Alexander Méndez
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Jueves 27 Junio, 2019
HORA: 12:00 AM
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