Un hombre identificado por la policía como Julio César Palacios Mondragón, de nacionalidad colombiana, falleció al recibir al menos 5 impactos de bala en el pecho, espalda y brazos, luego de que al parecer protagonizara una riña en una fiesta que se celebró en una casa de Jacó.
Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que la víctima mortal era uno de los primeros sicarios del país, trabajó haciendo cobros en el centro de San José para los hermanos libaneses Akl, tenía antecedentes por droga y portación de armas.
Según las autoridades, el hoy occiso habría mantenido una disputa con un sujeto que los obligó a salir del inmueble y darse golpes, sin embargo todo parecía que la gresca quedaba ahí y no pasaba a más.
Pero 24 horas después el criminal buscó a Palacios Mondragón, quien viajaba en bicicleta por las inmediaciones de la iglesia de los testigos de Jehová en Jacó, desenfundó el arma y lo llenó de plomo. Lo dejó sin vida a un lado de la carretera.
Al parecer el pistolero, quien viajaba con otro hombre, sería de la misma nacionalidad de la víctima, iba en una motocicleta tipo scooter rosada que dejó abandonada muy cerca donde hallaron el cadáver. Por este hecho la policía presume que es vecino de la zona.
El hoy fallecido vestía una pantaloneta negra, una camiseta de tirantes blanca, usaba sandalias y al parecer pretendía ponerse a salvo en una propiedad privada, pero las balas de una pistola calibre 9 mm lo alcanzaron y su cuerpo quedó boca abajo.
Oficiales de la Fuerza Pública custodiaron la escena del tiroteo, mientras los agentes del Organismo de Investigación Judicial se hicieron cargo del levantamiento del cadáver.
Recolectaron evidencia importante que lleve con el pistolero y los motivos del crimen.
