Un fallo histórico del Tribunal de San José le dio la razón a la famosa Eugenia Cartín (la de tra-ba-jan-do), traductora víctima de una filtración en redes sociales de una llamada telefónica que realizó a la empresa Tigo.
Ella ganó una demanda contra la empresa Repretel por una imitación suya en TV durante las populares transmisiones de fin y principio de año entre 2017 y 2018.
Hay que recordar que, para los eventos en la plaza de toros, Fabián Murillo se inspiró en la ofendida para crear el personaje “Doña Genia”.
Se confirmó que, tras el daño a la imagen de la señora en calidad de adulta mayor, que no era figura pública, debían indemnizarla por la suma de ¢70 millones.
En un principio el abogado de la ofendida solicitó hasta ¢500 millones.
La demanda se sustenta en los artículos 28 y 41 de la Constitución Política; los 59, 1.045 y 1.046 del Código Civil; el 7 de la Ley Integral de la Persona Adulta Mayor; el 5 de la Declaración de los Derechos y Deberes del Hombre y el Ciudadano; el 8 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
La sentencia crea una serie de preguntas: ¿Se puede seguir imitando públicamente en radio o televisión, incluso en redes sociales? ¿Está en peligro el trabajo de imitador en Costa Rica? ¿Qué pasó con el derecho de hacer chota en el país, elemento folclórico nacional?
Les preguntamos a varios humoristas, imitadores e incluso un historiador sobre el particular (ver recuadro).
“EMPRESA ACTUÓ A DERECHO”
Fernando Contreras, presidente de Repretel, por medio de un comunicado que se envió a DIARIO EXTRA, dijo que la televisora se opone al fallo. Adelantó que analizarán la sentencia con lupa y se expresarán con total propiedad en los próximos días.
Insisten en que la empresa actuó a derecho. “No hemos terminado aún de revisar la sentencia y sus alcances para definir nuestro curso de acción. Estamos convencidos de que la empresa actuó a derecho, lo mismo que el humorista que creó e interpretó el personaje de Doña Genia, incluso respaldados por jurisprudencia local e internacional en relación con los géneros humorísticos de parodias e imitaciones, por lo que a nuestro parecer la demanda debió ser rechazada.
Nos referiremos al contenido de la resolución hasta que la analicemos detenidamente junto con nuestros asesores legales”, adujo.
Fabián Murillo, creador de Doña Genia, dijo que no iba a referirse al fallo. Sostiene que está tranquilo, porque “soy imitador de voces y hay personajes en camino, seguiré trabajando”. Enfatizó que no le preocupa “tener o no tener X personaje”. “No es una limitante por ser una persona mayor, Óscar Arias es una persona mayor, todo mundo se mofa de él y no demandó por ser figura pública. Para mi doña Eugenia es una figura pública. Incluso una muchacha que vendía tazas de doña Eugenia iba a ser demandada y la señora recibió plata. Las demandas que hizo fueron públicas y nadie hace eso, tienen que ser privadas, pero al hacerlo ya es figura pública.
Si la imité es porque creo que es figura pública. Y lo de adulta mayor, Figueres, Arias y Pacheco lo son y nadie dice nada porque son expresidentes”, concluyó.
Norval Calvo
Pelando el Ojo
“Mientras sea figura pública está expuesta al escáner de la opinión pública y su límite de privacidad es sumamente reducido, según lo ha dicho la Sala Constitucional, por lo tanto no hay posibilidad de demanda. Normalmente los personajes que se imitan más bien con ello mantienen vigencia pública. Son parodias e imitaciones. Nunca he dejado de imitar a alguien. Primero porque nunca le he faltado el respeto a algún imitado y menos porque me lo hayan solicitado, situación que no ha ocurrido. Se han molestado, sí, y reclamado, sí, pero como para solicitarme que no lo haga, nunca. Algo sin forma el ridículo en su máxima expresión, en vez de sentirse el imitado honrado”.
Vladimir de la Cruz
Historiador
“La chota la hemos tenido históricamente siempre en Costa Rica, pero el problema es cómo se haga, que no puede ser denigrante, que no afecte la imagen de la persona y su intimidad. Si es un personaje público está expuesto a que sea imitado en todas sus formas, pero una persona que no pertenezca a ese espacio se puede sentir mal, tener un daño psicológico. Puede ser que ante esta situación la gente se enferma y acusa. La chota se hace en el país siempre, pues es parte de la crítica sarcástica para hacer reír”.
Adolfo “Opo” Marín
Humorista
“Es una mordaza que se le hace al humorista nacional castigándolo en todas sus formas, ya sea imitador o comediante. Al que tiene la misión de hacer reír, en estos tiempos tan críticos con todo lo que está pasando en el mundo poniéndonos una mordaza a todos los que nos dedicamos a hacer reír. Esto que le pasa a Repretel no debería de pasar, la chota siempre ha estado en Costa Rica, algunos finos y otros pasados. Esa es nuestra idiosincrasia, todo es malo y todo es ofensivo. No se ajusta a la realidad”.
Gustavo Ramírez
Pelando el Ojo
“Me parece una exageración llegar hasta ese punto, cuando se sabe que a los ticos se nos caracteriza por hacer chota de todo, pero bueno siempre alguien se sale del saco”.
Carlos Ramos
Porcionzón
“Me parece que esto afecta a los imitadores, no a mí. No me afecta pues solo cuento chistes y solo imito a personajes míos, inventados por mí. Yo no soy imitador, solo soy contador de chistes. Con todo el respeto no voy hablar de eso pues no me corresponde. De eso debe hablar Norval Calvo, Rolando Carmona y Franklin Vargas, entre otros, no yo que soy contador de chistes”.
Rolando Carmona
Humorista e imitador
“Cualquier persona que uno imite ya sea pública o no se debe hacer bajo todas las líneas, pero sin faltar el respeto ni ridiculizarlas, menos hacer cosas que los personajes en la vida real no hagan. La imitación le da brillo al personaje y repito todo con respeto se puede hacer. Si una persona es imitada sea pública o no pública, si le faltan el respeto tiene derecho a enojarse”.
PERIODISTA: Ariel Chaves González
EMAIL: [email protected]
Miércoles 20 Marzo, 2019
HORA: 12:00 AM
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