El pasado 4 de febrero, se celebró el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) realizó una campaña para poner fin al comúnmente conocido como cáncer del cuello de la matriz (útero).
La realidad de este tipo de cáncer es abrumante. A nivel mundial, el cáncer del útero o matriz es el tercer tipo de cáncer más frecuente en las mujeres -después del de mama, colon y recto-, donde la mayoría de casos se diagnostica entre los 35 y los 50 años y solo una minoría equivalente al 10% corresponde a mujeres mayores de 65.
¿Cómo se desarrolla este tipo de cáncer y qué lo puede causar? Se ha identificado como precursor la infección persistente por un virus llamado papiloma humano (VPH), un virus que se transmite por contacto o relaciones sexuales, y que además puede ser una de las causas de otros tumores en la vagina, ano, pene, garganta y la cavidad de la boca.
La mayoría de infecciones y lesiones leves por VPH son localizadas, y se resuelven de forma espontánea en un período de 8 meses a 2 años sin dejar ningún tipo de lesión. Pero el tener una infección por VPH de alto riesgo en el área del cuello del útero, puede ocasionar anomalías que posteriormente pueden evolucionar a cáncer.
Hay factores que aumentan el riesgo de padecer este tipo de cáncer entre ellas, portar una infección con virus del papiloma humano tipo 16, 18, 45, 56, tener el sistema inmunológico debilitado por alguna razón, el uso prolongado de pastillas de planificación, haber tenido muchos partos a término, el temprano inicio de la actividad sexual, que la persona haya tenido muchas parejas sexuales, el fumado, uso de dispositivo intrauterino (DIU), tener menos de 17 años en el primer embarazo a término, entre otros.
¿Cómo prevenir esta enfermedad? La prevención es la mejor herramienta para evitar contraer la infección del virus del papiloma que como mencionamos antes es el precursor de lesiones cancerosas.
Realizarse pruebas de detección de afecciones en el cérvix o cuello del útero (Papanicolaou, prueba de detección de virus papiloma humano), permiten detectar y tratar las lesiones precancerosas a tiempo, evitando su progresión a cáncer. Se recomienda realizarse la prueba del Papanicolau en toda mujer después de los 21 años, esta prueba es sencilla, rápida, no dolorosa y puede salvar muchas vidas.
El uso correcto del preservativo durante las relaciones sexuales puede reducir el riesgo de infección por VPH en mujeres hasta un 70%. Otra medida preventiva es aplicar la vacuna papilomarivurs, que se recomienda administrar en mujeres jóvenes sanas, en edad pre y adolescente, que estén sanas sin la infección del virus del papiloma y puede prevenir hasta 70% de todos los cánceres cervicouterinos. La vacuna no es efectiva cuando la infección ya se estableció.
Es posible prevenir un cáncer si usted se informa y pone en práctica las medidas de prevención. Recuerde el autocuidado es una responsabilidad individual, prevenga el cáncer a tiempo.
*Colaboró la Dra. Thais Mayorga Acosta
Médico máster en Salud Pública
Coach Ontológico de Salud
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CRÉDITOS: Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica*
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Lunes 18 Febrero, 2019
HORA: 12:00 AM
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