La moneda quedó en el aire, pero con cierta ventaja para el Deportivo Saprissa. En el juego de ida de la gran final nacional, Herediano no pudo sacar máximo provecho de su estadio, empataron 2-2 y ahora todo se definirá el domingo en la casa del Monstruo.
Los rojiamarillos tuvieron todo a su favor para irse al descanso con el 2-0 en la pizarra, sin embargo el upaleño José Guillermo Ortiz no quiso hacerlo.
En la última acción de la primera parte Jimmy Marín le sirvió un pase magistral, en el mano a mano con el arquero Kevin Briceño perdonó. Ortiz quedó en el suelo lamentándose de un golpe, pero parecía que más bien buscaba explicaciones al gran fallo frente al marco.
El equipo de Jafet Soto salió decido a anotar primero, se veía que la intención era festejar en los minutos iniciales, pero el cerco defensivo del Saprissa, con cinco hombres en la zaga, le complicaba las cosas.
Además jugadores como Allan Cruz, Omar Arellano y Jimmy Marín, que han sido determinantes en otros momentos, no estaban conectados.
El Monstruo mostraba muy poco en ofensiva, algunos amagues de Cristian Bolaños y otros de Johan Venegas recordaban que la “S” tenía gente en ataque, pero no pesaba, el arquero Leonel Moreira tenía un anoche tranquila.
En el último duelo de Herediano ante la Liga, Ortiz se fue en el entretiempo por no concluir una opción clara ante Patrick Pemberton, parece que no aprendió la lección.
Además de la que erró al minuto 45, también perdonó al 26’. En esa ocasión entró con buen chance, pero no pudo en el duelo ante Jaikel Medina.
El partido era emotivo, el control lo ejercían los rojiamarillos, pero los morados estaban bien plantados, el 0-0 era un buen negocio para ellos, por momentos el cotejo perdía interés y la afición se desesperaba en las gradas, no obstante al 39’ todo cambió.
Marín cobró un tiro de esquina, todos los anteriores los habían ejecutado muy mal, tanto él como Gerardo Lugo, quienes se los repartieron. Esta vez le salió como quería, el balón llegó al corazón del área, Lugo trató de cabecear y la redonda le quedó servida a Óscar Esteban Granados, quien cerraba en el segundo palo, de cabeza conectó para mover lo mecates y poner el 1-0.
RESPIRO
Para el segundo tiempo la tónica siguió. El Team manejaba los hilos del juego y el Saprissa trataba de aguantar los embates del rival. Los florenses estaban en casa, por lo que no podían darse el lujo de echarse atrás.
El poderío ofensivo de Herediano crecía y parecía que era cuestión de tiempo para que cayera el segundo gol. Las opciones se generaron, pero el mal de los rojiamarillos hacía aparición, faltaba puntería para mandar el esférico al fondo, se cansaron de botar goles.
Ortiz volvió a hacerlo. Al 66’ quedó solo ante el arquero, pero se le olvidó anotar. Su remate salió desviado, al igual que él, pues el técnico se cansó de su pasividad y lo mandó al banquillo. La “S” solo ocupó un buen centro para emparejar los cartones.
Abrieron por el sector derecho, desde ahí Cristian Bolaños envió la redonda al centro del área, donde estaba Johan Venegas, quien solo ocupó conectar con la cabeza para empatar el negocio al 68’. Los florenses no renunciaron al ataque, el gol morado fue un golpe al ego.
De táctica fija cayó el 2-1. Randall Azofeifa cobró un tiro libre desde la izquierda, encontró a Allan Cruz, quien metió el balón al área, ahí se elevó Aldo Magaña para ganar en las alturas y penetrar por segunda vez la portería del Monstruo al 78’.
El orgullo de los tibaseños también fue tocado. A tan solo 4 minutos del final cayó el 2-2 definitivo. Torres mandó un centro que terminó con el balón suelto y servido para que Alejandro Cabral rematara sin contemplación y pusiera el balón en el fondo del marco.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Lunes 17 Diciembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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