La dirigencia de Liga Deportiva Alajuelense sacó hace unos días una licitación sobre propiedades en Alajuela que se ajustaran a una serie de requisitos para la construcción de un nuevo estadio.
Fernando Ocampo, presidente del equipo, indicó que recibieron ofertas de todas partes de la provincia. Sin embargo, trascendió que uno de los terrenos que más seduce a los directivos, y por el cual apostarían, es el Parque Viva, antiguo Autódromo La Guácima que pertenece a Grupo Nación.
Se le consultó a Ocampo sobre esta posibilidad. “No puedo decir que sí o que no, la información la vamos a dar hasta que se esté en la asamblea (de socios)”, respondió.
Precisamente, este sábado los socios rojinegros están citados para dicha reunión. No obstante, el jerarca de la institución fue enfático en que no se tomarán decisiones en firme respecto a este tema.
“Solo se va a informar del estudio de factibilidad que se le pidió a la junta directiva. Una vez que se conozca, será la misma asamblea la que defina qué procede, pero por el momento no se decidirá nada”, comentó.
PLAN B
La dirigencia manuda insiste en la posibilidad de construir un nuevo estadio. Sin embargo, esta no es una decisión que pueda definir la junta directiva del club, para poder cumplir con su objetivo necesitan luz verde por parte de los socios de la institución.
El plan A se les cayó. En primera instancia los rojinegros pretendían que la Municipalidad de Alajuela les comprara el actual terreno del Alejandro Morera Soto, así el ayuntamiento podía asentarse en dicho lugar y ellos buscarían nuevo rumbo.
Después de un estira y encoge, varias propuestas por parte del equipo de fútbol y una serie de requerimientos, se determinó que la municipalidad no haría el negocio.
Vale recordar que el avalúo que se hizo en su momento con el gobierno local determinó que el costo del escenario deportivo era de $10 millones, unos 6 mil millones de colones.
Ante la posición de la municipalidad, la dirigencia no se quedó de brazos cruzados, por lo que intenta tocar otras puertas. No obstante, la asamblea de socios solicitó el famoso estudio de factibilidad para determinar si es conveniente o no deshacerse del actual reducto.
Ocampo reiteró que la última palabra la tienen los socios, pero adelantó, “si el estadio se le da a alguien (se vende), hay que construir uno nuevo, que es el objetivo que se ha planteado o que por lo menos hay que investigar”.
Fue enfático en que los predios de Turrúcares, donde se ubica el centro de alto rendimiento, no se utilizarán para la construcción de un inmueble nuevo.
De igual manera, recordó que la iniciativa nace porque el Alejandro Morera Soto tiene ciertas limitaciones, como por ejemplo el parqueo. Explicó que carece de elementos con que cuentan los escenarios más modernos, y no tienen posibilidades de crecer en el Morera porque están tapados por los cuatro costados.
PERIODISTA: Andrés Zárate Sánchez
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Martes 18 Septiembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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