Cueva a reventar
El estadio Ricardo Saprissa es uno de los escenarios más “temidos” por los rivales por la presión que ejerce. Por eso la Selección Nacional lo utilizó muchas veces para juegos eliminatorios, principalmente cuando el oponente era Estados Unidos. Ese elemento motivacional que despierta su gente buscará aprovechar el Deportivo Saprissa para coronarse monarca del Torneo Clausura 2018.
A lo interno del vestuario morado consideran que la principal arma para esta final es su estadio, en el que tienen varios partidos sin perder. Entienden que a medida que su gente los impulse sería casi imposible salir cabizbajos. Por el contrario, se alistan para celebrar su estrella número 34.
“La serie va empatada, la gran ventaja es nuestro terreno de juego y la afición”, dijo el técnico Vladimir Quesada.
Cambio de sistema
Saprissa será más ofensivo de lo que fue el partido anterior. Quesada prepara el cambio de sistema para ir a buscar el encuentro desde el inicio.
En la idea plantó un equipo con línea de 5 para contener el caudal ofensivo del Team, además para sostener a su escuadra firme por las pocas horas de descanso que tuvieron.
Pero en casa es otra historia. El timonel recuperará el hombre ofensivo que restó en la casa rojiamarilla. Es decir, Alexander Robinson le dejará su lugar a Ariel Rodríguez. De esta manera Saprissa tendrá dos puntas bien marcados y dos extremos desequilibrantes. Adelante estarían Rodríguez con David Ramírez y por las bandas Daniel Colindres y Jerry Bengtson o Johan Venegas.
Esperan a Barrantes
Los morados esperan la recuperación del volante centro, Michael Barrantes, para terminar de definir el 11 estelar. Barrantes se lesionó el juego anterior y apura el paso para recuperarse al 100% y estar en el choque de vuelta.
Barrantes es el punto de equilibrio del juego saprissista, de ahí que el cuerpo técnico espera contar con él. Es un jugador con visión de juego, que aporta en marca y cuenta con un potente remate de larga distancia.
Bajan tono al arbitraje
De paso, en el Monstruo les bajan el tono a las críticas realizadas por el Herediano sobre la labor arbitral.
“Yo me he puesto a arbitrar cuando hacemos partidos y es muy difícil quedar bien con los dos equipos y con cada uno de los muchachos. A veces lo desesperan tanto a uno que quisiera repartir coscos”, comentó Quesada, quien asegura que también han sido perjudicados por decisiones de los soplapitos.
Cambió críticas por aplausos
En lo personal, Vladimir Quesada está cerca de levantar su primera copa como técnico. Antes lo hizo como asistente acompañando a Carlos Watson, pero espera colgar su primera estrella en sus vitrinas como primer entrenador.
En un momento determinado del torneo la afición saprissista pidió la cabeza del técnico por el bajo rendimiento. Pero parece que ese momento quedó en el olvido y ahora Quesada es ovacionado por el buen momento futbolístico que vive Saprissa.“Yo no vivo de malos momentos, vivo del presente”, citó Vladimir Quesada.
Sequía
E
n Herediano la preocupación apunta a la sequía que enfrentan sus dos goleadores. Yendrick Ruiz y Jairo Arrieta se fueron en blanco en la cuadrangular, no lograron marcar goles y eso pone a pensar al cuerpo técnico, ya que gran parte del aparato ofensivo depende de estos dos hombres.
Ruiz contabiliza 9 anotaciones y Arrieta 8, siendo los dos referentes del ataque florense. Pero si se toma en cuenta a los otros puntas, Luis Ángel Landín y Jonathan Hansen, su cuota en la red es bastante baja.
En el Team depende del buen estado con que lleguen estos hombres, principalmente Ruiz y Arrieta, para intentar arrebatarle la copa a Saprissa en su propio campo.
¿Precavido u ofensivo?
El empate en el primer enfrentamiento pone contra la pared al cuerpo técnico del Team a la hora de definir el boceto de juego para la visita al Ricardo Saprissa. ¿Ser precavido o presionar al rival desde el inicio?
Si bien es cierto Herediano necesita salir a ganar porque no sacó ventaja en su campo, el empate tampoco es del todo malo porque obligará a tiempo extra e incluso jugarse el cetro en la tanda de penales.
De ahí que es difícil suponer qué buscará el entrenador florense. Buscar un partido inteligente en el que primero se pare bien atrás y luego atacar el marco contrario; o bien, intentar anotar primero para pasarle la presión al Monstruo y silenciar La Cueva.
“Me queda la sensación de que vamos a ir a ganar este campeonato al Ricardo Saprissa, que junto a mis jugadores vamos a celebrar en ese estadio, vamos a ir a trabajar este partido merecidamente”, apuntó el técnico Jafet Soto.
Buen visitante
A favor del Team para el pulso de vuelta de la gran final del Torneo Clausura 2018, está el buen porcentaje que presenta como visitante.
De los 14 partidos que registra el cuadro florense en el certamen, sacó 6 victorias, 4 empates y perdió en 4 oportunidades. Una de esas derrotas fue ante Saprissa recientemente, en la segunda fecha de la cuadrangular, con un marcador 2 por 1.
Los florenses tienen un porcentaje del 53% fuera de su campo para 22 puntos.
“Ojalá nos dejen (ganar) porque vamos a ir a hacer un muy buen partido, vamos a ir a trabajar ese juego como lo tenemos que trabajar y vamos a ir a buscar el título al Ricardo Saprissa contra todo y contra todos. Lo tenemos muy claro que es contra muchos, muchísimos”, manifiesta Soto, mandándole un mensaje al cuarteto arbitral y a su rival.
Piden arbitraje justo
Más allá de la táctica que trabajó y lo que pueda mostrar en el campo del Ricardo Saprissa, a lo interno del Herediano piden un arbitraje justo.
Soto criticó fuertemente a la Comisión de Arbitraje, representada por el presidente Ricardo Cerdas y el asesor Carlos Batres.
Por lo que para este segundo partido claman por un arbitraje justo.
“La verdad es que don Ricardo y Batres ya se tienen que ir, porque ya tienen año y medio trabajando ahí y no se ve la diferencia del trabajo que están haciendo”, manifestó el D.T., y añadió: “Lo del arbitraje es un tema de preparación, no pueden equivocarse tanto”.
D.T. a cambiar historia
Para Jafet Soto el partido es muy especial, ya que busca su primer título como entrenador, además de intentar cumplir su gran sueño de festejar un título con su amado Herediano; algo que no consiguió como jugador y todavía no lo logra como D.T.
Como gerente ha dado la vuelta olímpica varias veces, pero no sentado en el banquillo como el responsable del equipo. Espera que esta oportunidad sea la vencida y que sus jugadores le respondan para salir victorioso de La Cueva del Monstruo.
