El Tribunal Penal de Pavas inicia el juicio por el asesinato de Gerardo Cruz tras la investigación que la Fiscalía de Hatillo desarrolló bajo el expediente 15-021637-042-PE, por el delito de homicidio calificado.
El debate arranca a las 8 a.m. y está programado para efectuarse hasta el 22 de enero de 2018; durante ese período, 17 personas participarán como testigos. Cruz encaró y filmó a un hombre que supuestamente grababa las piernas de una mujer mientras caminaba por la Avenida Central en San José. Dos días después (el 7 de octubre de 2015) de hacer público el video, recibió una puñalada en el tórax.
El joven fue atendido en la vía pública en San Sebastián y, debido a la gravedad de la herida, lo trasladaron de emergencia al Hospital Calderón Guardia, donde murió 42 días después de su ingreso.
AL BANQUILLO
La Fiscalía acusa por el ataque a cinco personas, identificadas como Fonseca Fernández, Valerín Fonseca (madre e hija), Chaves Cerdas, Arce Barrientos y Castillo Espinoza.
Los judiciales allanaron cinco viviendas en El Carmen de Goicoechea, donde capturaron a las féminas; en Concepción Abajo de Alajuelita, detuvieron al que contactó a los sicarios para que le hundieran un cuchillo a Cruz; y en San Francisco al mediador.
Los primeros cuatro imputados permanecen en prisión preventiva, medida cautelar que se extenderá, inclusive, hasta el 8 de febrero de 2018; mientras que Castillo, por tener una participación menor en los hechos delictivos, desde el inicio del proceso cumple medidas cautelares distintas a la prisión, de firmar una vez al mes y no perturbar o contactar a ninguna de las partes.
Se presume que Fonseca Fernández pagó ¢4 millones, dio un vehículo y mantuvo relaciones sexuales con uno de los sicarios a cambio del ataque, versión que investigaron las autoridades.
Además de estas cinco personas, un sexto imputado, quien es menor de edad, fue declarado como coautor del homicidio; él se sometió a un proceso abreviado, en otras palabras, aceptó los hechos que se le atribuyen, por lo que el Juzgado Penal Juvenil le ordenó siete años de internamiento en centro penal, los cuales deberá cumplir, junto con cinco años de libertad asistida y dos años de órdenes de orientación y supervisión.
LÍO PASIONAL
Cruz y Fonseca anduvieron juntos cuatro meses, luego de que se conocieran en una panadería en San Sebastián. La relación se mantuvo hasta que Fonseca se percató de que el ahora fallecido presuntamente había embarazado a otra mujer, momento en que al parecer dieron inicio las amenazas de forma recurrente.
La experimentada dama, a quien supuestamente le gustan los hombres más jóvenes que ella, lo amenazó con que, si se iba con esa otra mujer, lo mataría.
Los familiares de Cruz delegaron la acción civil resarcitoria en la Oficina de Defensa Civil de la Víctima del Ministerio Público, para exigir una indemnización por los daños y perjuicios sufridos a raíz del homicidio.