La Policía de Control Fiscal (PCF) del Ministerio de Hacienda incursionó en la Dirección Regional en Pavas, donde se ubica la oficina del jefe de la Fuerza Pública de San José, Francisco Cordero, a quien denunciaron por un supuesto delito de contrabando de mercancías.
Irving Malespín, director de la Policía Fiscal, confirmó a DIARIO EXTRA que se realizó una revisión dentro de la oficina de Cordero, donde se ubicaron varias cajas de diversos productos que en apariencia eran comercializados a los propios uniformados.
“Hace varias semanas se recibió una denuncia contra un oficial de Fuerza Pública, de apellido Cordero, donde se indicaba que usaba tiempo laboral para hacer ventas de productos de contrabando, propiamente, planchas, hornos, microondas, perfumes y aguas de uso personal.
En virtud de esto, un grupo de Policía Fiscal se desplazó a la oficina de este funcionario y efectivamente se logró comprobar que existían artículos de procedencia no clara, todo se decomisó y se abrió un expediente para enviarlo a Aduana por lo que el Estado dejó de percibir”, explicó Malespín.
El jerarca de la policía que persigue delitos tributarios argumentó que se comunicó a la dirección y subdirección general de la Fuerza Pública sobre lo ocurrido, siendo Marlon Cubillo la persona que recibió los escritos respectivos luego de la operación.
Pese al hecho, la oficina de prensa del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) indicó a través de un correo electrónico que no tomó ninguna medida administrativa contra el funcionario y que existe a nivel interno un órgano creado con el fin de investigar los hechos antes citados.
“Con respecto a su consulta, se ha formado un órgano director para conocer un caso relacionado con el funcionario que su persona consulta (Cordero), sin embargo, la etapa en la que se encuentra el proceso es de acceso restringido, solo para las partes, según normativa vigente”, expresaron.
PLANCHAS
Y HASTA CHICLES
Dentro del espacio personal de Cordero, los agentes de investigación de Hacienda hallaron planchas de pelo, perfumes, ropa y hasta cajas de chicles.
Informaciones a las que tuvo acceso DIARIO EXTRA señalan que la mercadería que comercializaba Cordero ingresaba a territorio costarricense desde la frontera de Paso Canoas, límite con Panamá, se trasladaba en camiones y vehículos particulares.
Sus principales clientes eran miembros de la Fuerza Pública, sin embargo, el jefe policial no contó con que se realizarían denuncias a nivel interno por el malestar que su negocio ilegal provocaba.
POR “VOLUNTAD PROPIA”
SE CAMBIÓ DE PUESTO
Cordero, según prensa del Ministerio de Seguridad, se encuentra de vacaciones actualmente, pero una vez que se reincorpore a sus labores, lo hará en la oficina de Asesoría Legal.
“Para aclarar: el señor (Cordero) está de vacaciones, no hay medida disciplinaria administrativa y él por voluntad propia decide regresar a su plaza como asesor legal cuando finalicen sus vacaciones.
Pero es voluntad propia de él, no hay medida impuesta, son cosas totalmente distintas”, recalcó Carlos Hidalgo, periodista de Seguridad Pública.
Marlon Cubillo, subdirector de la Fuerza Pública, giró en 2015 la última directriz relacionada con el tema, en que queda totalmente prohibido la comercialización de productos como perfumes y electrodomésticos en las diferentes delegaciones del territorio nacional.
“Queda terminantemente prohibido permitir ventas de electrodomésticos, colonias, tecnología, ropa y otros productos en las instalaciones policiales (delegaciones distritales, cantonales, direcciones regionales, direcciones, departamentos y secciones)”, señala el escrito de Cubillo.
El Periódico del Pueblo supo que existen funcionarios que han sido despedidos por esta situación, debido a la evasión fiscal en contra del Estado.
