Diario Extra - Urticaria

En esta ocasión vamos a conversar sobre una patología de alta frecuencia en la consulta dermatológica, la cual presenta grandes molestias en el paciente que la padece: la urticaria. Esta enfermedad tiene una lesión característica común llamada habón o roncha. Un habón es una lesión de contenido sólido, superficial, mal definida, de diferente tamaño, fugaz (no dura más de 24 horas) y desaparece sin dejar huella. Las lesiones pueden ir desde pocos milímetros a diversos centímetros de diámetro, inclusive pueden confluir formando lesiones de gran tamaño pudiendo afectar áreas muy extensas de la piel. Las mismas ocasionan un intenso prurito o picazón.

También tenemos el angioedema, que es una variante profunda de la urticaria, se caracteriza por una hinchazón (edema) intenso, que afecta la parte más profunda de la piel, teniendo de esta manera un aumento del volumen importante de un área de la piel la cual es localizada; así por ejemplo aumento de un labio, párpado, ceja, etc. Es más doloroso que pruriginoso (que pica) y afecta a menudo las mucosas, como la bucal y suele resolverse espontáneamente.

Epidemiología

-Es una enfermedad de distribución mundial que afecta del 2% al 20% de la población.

-Se puede observar a cualquier edad, sexo, edad, ocupación o raza.

-En el caso de las urticarias crónicas se observan más en mujeres entre la 3ra y 4ta décadas de la vida.

Clasificación de las Urticarias y sus causas

Las Urticarias se clasifican en agudas y crónicas y éstas a su vez se originan por múltiples causas.

Aguda

Este tipo se caracteriza por repetir unos cuantos días y posteriormente desaparecer. Dentro de las causas que originan este tipo de urticarias tenemos los alimentos y los medicamentos.

Crónica

Este tipo es de mayor severidad y es una entidad que va a repetir por 6 meses o más y se observa al menos 2 veces por semana. Dentro de las causas que originan este tipo de urticarias tenemos las ocasionadas por infecciones parasitarias, procesos malignos, estímulos físicos como puede ser el ejercicio, el calor o el frío, el estrés, exposición solar intensa (mayor a una hora), agentes ambientales (animales, alimentos, látex).

Angioedema

Respecto al mencionado angioedema, consiste en una inflamación transitoria de la dermis y el tejido celular subcutáneo y ocurre principalmente como reacción a fármacos como la aspirina, antiinflamatorios (ibuprofeno – indometacina) y algunos antihipertensivos o por reacción cruzada entre éstas. Además, el estrés puede ser un factor desencadenante importante.

Diagnóstico de la enfermedad

-Es muy importante realizar un buen interrogatorio al paciente que nos oriente en la enfermedad. Tiempo de evolución de las lesiones, localización anatómica, síntomas (prurito, ardor, quemazón), condiciones de vida, estado emocional.

-Examen físico: Buscando la lesión característica como lo es el habón, confluencia de lesiones y severidad de la enfermedad.

-Se puede realizar biopsia de las lesiones menores a 24 horas.

-Pruebas de parche.

Tratamiento

-Es fundamental evitar los factores desencadenantes (estrés, medicamentos, alimentos).

-Uso de antihistamínicos, dentro de los cuales tenemos de primera y segunda generación. Los primeros tienen como efecto secundario la sedación, por lo que deben ser utilizados durante la noche, un ejemplo de estos es la clorfeniramina. Los de segunda generación no tienen este efecto sedante y pueden ser utilizados durante el día, tal es el caso de la fexofenadina.

-En casos más severos se debe recurrir al uso de esteroides, ya sea por vía oral o intramuscular según el caso.

Nota importante

Se debe tener presente que en algunos casos la reacción urticarial puede ser muy severa, puede comprometer la vía aérea (adecuada respiración) y poner en riesgo la vida de la persona, por lo que se debe actuar rápidamente con el tratamiento. En algunos casos se debe de requerir además la utilización de adrenalina subcutánea como parte de los medicamentos para combatirla.