El juicio que se sigue contra un hombre de apellido Núñez acusado de femicidio, homicidio, hurto agravado y falso testimonio contra su mujer y la hijastra de este, continuó con la incorporación de prueba documental y la declaración de la primera persona que observó al imputado.
En el aporte que hacían los involucrados en el caso, los jueces dijeron que existe un parte policial donde el acusado había amenazado con un mazo y trataba mal a su mujer, por lo que se ordenaba medidas de protección. Agregaron que Angelita no quería más daños y que no volviera a la casa.
Al parecer el imputado, quien trabajaba como taxista, con el objetivo de apoderarse de los bienes de su pareja sentimental, identificada como Angelita Vega Ocampo, y obtener la custodia del hijo de ambos ideó un plan que consistía en simular un asalto en su vivienda.
El 11 de agosto de 2014 en horas de la noche, en Mercedes Norte de Heredia, el acusado presuntamente permitió el ingreso de al menos una persona a la vivienda para asfixiar a las mujeres con cinta adhesiva gris de 6 centímetros de ancho.
Presuntamente los hombres hallaron a la ofendida y a su hija de 15 años, apellidada Paniagua, en aposentos distintos y les propinaron golpes hasta inmovilizarlas. Una vez en estado de indefensión les amarraron los pies y las manos, utilizando para ello gasas plásticas blancas.
Se trata de Jeffrey Spencer, quien narró al tribunal penal de Heredia lo que vio ese fatídico día donde fueron ubicadas sin vida Angelita y su hija, quienes estaban amarradas de pies y manos y tenían cinta adhesiva en la boca y la nariz.
"Escuché una voz y me asusté, volví a escuchar y no vi nada y la tercera vez oí que alguien pedía ayuda. Bajé las gradas de mi casa y vi a Núñez sentado en la cochera, con las manos hacia atrás y recostado en el taxi y me dijo que se habían metido a robar", recordó.
Spencer agregó que sintió miedo, sin embargo, fue el teléfono para pedir ayuda.
"Llamé a la policía y le decía a la operadora lo que el acusado me decía, como que la familia estaba adentro amarrada. Una oficial sacó de la casa a un bebé y el compañero le quitó las amarras a Núñez, nunca escuché nada anormal, sin embargo cuando llegaba a mi casa el perro de ellos me ladraba", recordó.
El testigo finalizó su relato diciendo que vivió como 2 años y se fueron debido a que la hija tenía miedo.
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CRÉDITOS: Fotos: Isaac Villalta
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Martes 29 Agosto, 2017
HORA: 12:00 AM
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