Sábado 20, Abril 2024

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° San José, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Alajuela, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Cartago, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Heredia, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Limón, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Guanacaste, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Puntarenas, CR

Nacionales

“Al Canciller le ha quedado muy grande la camiseta”

Pablo Barahona, exembajador ante la OEA:

  • El peor error de la política exterior y de Manuel González: no ha habido absolutamente ninguna mejoría en nuestras relaciones con Nicaragua

  • Pablo Barahona, exembajador en la OEA, conversó con Iary Gómez, gerente general del Grupo Extra, y Paola Hernández, directora de DIARIO EXTRA

  • Tenemos un Canciller que le ha quedado muy grande la camiseta, un Canciller escaso

Apoco más de un año que el abogado Pablo Barahona dejó su cargo como embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), conversó con DIARIO EXTRA sobre la polémica que acompañó su salida, ya que fue acusado de aplicar malos tratos a sus subalternos. 

Barahona recuerda el episodio para fundamentar además su criterio sobre el mal manejo del canciller Manuel González, a quien lo tilda de “escaso” para el puesto, y alertar que “la carrera diplomática costarricense está en un serio problema”.

La voz de Barahona se suma a la de diputados de oposición, quienes han pedido la salida de González.

En adelante un extracto de la entrevista con El Periódico de Más Venta en Costa Rica. 

En marzo de 2016 usted dejó la OEA, justo en medio de una acusación por acoso laboral. ¿Fue presionado a dejar el cargo? 

-Nunca hubo ni un procedimiento administrativo ni una denuncia de ningún tipo y de ningún carácter en mi contra. Todo lo contrario, fue una gestión, que como la calificó el mismo Presidente de la República a los medios, fue impecable. Yo tuve que enfrentar dificultades serias, por ejemplo, la misión a mi cargo estuvo muy carente de personal, pero además con personal muy carente, dos funcionarios en su primera misión exterior, con escasísima lectura del ambiente político, con muy poca capacidad para redactar informes. Mis antecesores tenían mínimo el triple, seis y hasta nueve funcionarios; dos ministros consejeros. Yo no tuve esa ayuda en todo mi periodo, sin embargo se lograron cosas importantísimas, desde el gobierno de Rodrigo Carazo ningún embajador de Costa Rica ha ostentado a la presidencia de la comisión más importante de la OEA, que es la comisión de Asuntos Jurídicos y Políticos. Dejamos instaurado el grupo para los afrodescendientes. La candidatura más importante, y la única realmente relevante este gobierno, ha sido la de doña Elizabeth Odio, de la cual el embajador de la OEA es el jefe de campaña. Costa Rica fue el primer país que le exigió a la canciller Deicy Rodriguez, como jefe de la diplomacia de Venezuela, tres cosas: la liberación de presos políticos, la fijación del calendario escolar y que Costa Rica no seguiría en nada a Venezuela que se saliera del curso democrático.

¿Se sintió coaccionado por la Cancillería? 

-Me causó mucha gracia que, desde la propia Cancillería, generaran “fake news”, lo que quiere decir que en la carrera diplomática costarricense estamos en un serio problema. Cuando la diplomacia costarricense recurre a anónimos para tratar de dañar integridades ajenas, es un problema muy serio, la verdad es que yo me reí mucho de eso, dejé el cargo, renuncié, fue así tanto que puse la renuncia el 11 de marzo, que es mi cumpleaños, es decir la escogí. Anticipando la maledicencia de esta gente… En lo más mínimo. Yo renuncio porque cuando asumí me ofrecieron otros cargos, mi compromiso siempre fue por dos años con el Presidente. Yo soy de los cancilleres que nombra directamente el Presidente, antes que el propio canciller, porque Manuel González no iba a ser el canciller, él fue la tercera opción del Presidente. 

Un informe de clima organizacional reveló los supuestos malos tratos… 

-Tenemos un problema de falta de seriedad. ¿Qué es un informe de clima organizacional? Es un estudio más o menos a la medida que emiten los funcionarios de carrera para validar lo que han dicho otros funcionarios de carrera sobre los que no somos de carrera, es muy arriesgado. Yo siempre cuando he sido jerarca he calificado a los funcionarios con drasticidad y ahí está la denuncia del diputado Mario Redondo cómo en este país los jefes les tienen miedo a los subalternos precisamente para no enfrentar procesos como estos.

¿Cómo definiría el manejo de la Cancillería? 

-Le diría que hay una falta de liderazgo muy serio a nivel político, que se dieron cuenta muy tarde de cómo funciona la burocracia dentro de la Cancillería y el problema que se tiene con la carrera diplomática, el celo desmedido que les tienen los de carrera a los nombramientos políticos, olvidando que son democráticos. A mí no me aplicaron ninguna red de cuido, ahora Manuel González le exige al personal de carrera que le pidan una autorización para pedir un informe de clima organizacional contra un embajador en Nicaragua, antes de poder examinar el informe de clima organizacional el canciller tiene que autorizarlo; en mi caso no fue así. Porque se dieron cuenta de la herramienta que están usando, como lo hicieron con el embajador de El Salvador 

Sobre los nombramientos políticos siempre hay una percepción de chanchullo.

-¿Quién le garantiza que los funcionarios de carrera son buenos? Muchos de los embajadores lo son, no porque hayan cumplido los requisitos sino porque les cayó un transitorio. En este momento hay dos funcionarios en la misión de Estados Americanos en Washington DC que no hablan inglés, una es embajadora. 

DIARIO EXTRA ha revelado casos como el de la madre de la jefa de despacho del Canciller, la señora Zaida Zúñiga, quien fue nombrada embajadora en República Dominicana. 

-Los concursos de los que se han quejado los de carrera, que en eso yo no me meto porque ese es uno de los grandes errores de Manuel González, fue para nombrar en segundos, terceros y cuartos a bordo del servicio diplomático. Ahí usted tiene otro gran problema y es que no se están queriendo ir; un embajador en el servicio diplomático, en servicio interno que nunca ha querido salir del país, eso es como que estudie preescolar pero no quiera tener contacto con niños. El Canciller abrió un montón de plazas donde nadie concursó, a parte porque los salarios tampoco están alcanzando, la gente no se va porque son ciudades muy caras, yo tuve que financiar mi estancia y la de mi familia. 

¿Hay corrupción en la Cancillería?

-Si usted no tiene una cabeza en el Ministerio suficientemente entendida en la materia, que sepa de política exterior y de política pública, no solo de diplomacia económica, sino de diplomacia política, solo hacer negocios internacionales y no hacer política, que son dos cosas diferentes, que implican capacidades instaladas diferentes… Se resuelve nombrando a un ministro que sepa dónde está parado. Tenemos un Canciller que le ha quedado muy grande la camiseta, un Canciller escaso. 

¿Por qué asegura que ha sido “escaso” Manuel González? 

-En diplomacia no se improvisa. Dos cosas puntuales, el pésimo manejo en el SICA incluyendo el berrinche de levantarse sin que eso tuviera ningún efecto, ante eso sobre todo Nicaragua no es que iba a reaccionar positivamente, pero además con lo que para mí es el peor error de la política exterior y de Manuel González: no ha habido absolutamente ninguna mejoría en nuestras relaciones con Nicaragua que es un tema central, es decir las relaciones no han sufrido el cambio y también pasaba por la política exterior. ¿Qué es lo que nos han vendido? Que tenemos algunas querellas o pleitos limítrofes que no podemos acercarnos, eso es lo más falaz que yo he escuchado. Esto está encapsulado en los tribunales, pero vamos a trabajar. Usted tiene muchísimos pleitos limítrofes entre muchos países en el mundo, los más marcados, como es Bolvia con Chile, por una salida al mar. Los diplomáticos no están para pelear. Para las migraciones que tenemos, las poblaciones flotantes en nuestras fronteras, el tema de seguridad… Nicaragua tiene los mejores índices de seguridad de América y podemos acercarnos para ver cómo hacemos para que aquí no haya tanta inseguridad. En la OEA yo tuve una cercanía muy grande con el embajador de Nicaragua que hoy es el canciller. 

No solo me parece que no se ha tenido prudencia para manejar candidaturas a nivel internacional y se ha perdido una tras otra, salvo la que por cierto yo era el jefe, en el gobierno, en la Organización de Estados Americanos para tener en Costa Rica una jueza en la CIDH. No se vive la candidatura con espíritu deportivo, se vive con espíritu político y responsabilidad política, hay que atender una tras otra, tras otra. En el tema de Venezuela este gobierno llegó tardísimo y a esta altura venir a decir lo que se está diciendo es bastante inocuo. Costa Rica llegó muy tarde si había un país llamado a liderar para buscar una salida constructiva, construir algo para que Venezuela no estuviera en el callejón sin salida que está en ese momento es Costa Rica, no le correspondía a México, Uruguay, le correspondía a Costa Rica. 

¿Mantiene cercanía con el Presidente?

-No, mucho hemos conversado sobre temas muy puntuales, pero no diría que estoy cercano, al Presidente le tengo un gran afecto, un profundo respeto, me parece que le ha tocado muy duro, pero respeto que en política exterior, desde donde yo le podría ayudar mucho, tiene a Manuel González, y en materia de seguridad, que es la otra área tiene a Gustavo Mata. Si me piden consejo lo doy, no me lo ha pedido, entonces no lo doy.

¿Usted tiene algún interés electoral?

-Yo ni siquiera soy del PAC ni de ningún partido. Yo no he militado nunca en ningún partido, soy profesor universitario de la UCR, un abogado litigante y un emprendedor. 

¿Como experto en temas de seguridad, qué opina del proyecto Ley de Extinción de Dominio?

-Como constitucionalista yo tengo mis reservas, me parece que no está bien concebida la figura, que vienen de un recetario internacional. Es una figura muy complicada, normalmente no hace falta extinguirle el dominio a algo, a un bien patrimonial, cuya fuente es ilícita. Deberíamos valernos de nuestra soberanía y buscar, porque tenemos buenos abogados para eso, buscar una figura intermedia que haga que no paguemos justos por inocentes, que eventualmente no haya abusos, que no se pueda usar esta figura, no digo ahora sino en otro gobierno, como una herramienta política para irse en contra de una familia dueña de un medio que está haciendo demasiada crítica o un periodista específico, y eventualmente un líder político, con muchas posibilidades de crecimiento en política y que le puede robar la titularidad política al partido de gobierno. Yo creo en los equilibrios, creo que no es por alarma social con la que deberíamos tomar decisiones tan sensibles, pero tampoco podemos seguir con un sistema tan mórbido, que es absolutamente incapaz de localizar al crimen organizado y al lavado de efectivos.

¿Cómo evalúa la política en materia de seguridad? 

-Costa Rica carece de una política de Estado en materia de seguridad, no tenemos un Ministerio de Seguridad sino un Ministerio Policía. Lo que tenemos es un esfuerzo insuficiente. No hay mejor política criminal que una buena política social. Me llama la atención que casi sea una moda de ministros de Seguridad rebajarse a estar anunciando cuántos kilitos se incautan, en vez de estar explicando por qué la mayoría de los kilos no se están incautando y están pasando. Me preocupa que estemos entregando nuestra soberanía de seguridad. Tenemos que reconocer que la lucha contra el narcotráfico tal como está planteada está perdida, cuando el Ministro de Seguridad dice que estamos en una guerra contra las drogas, eso está proscrito, eso no se acepta, esto no puede ser una guerra porque como guerra la perdemos, hay que afrontarlo con valentía y nos ha ido agarrando tarde, porque no hay suficiente conciencia política. Cuando hablo de política de Estado uno examina que a esta altura Costa Rica debe estar blindada ante el desarme de las FARC en Colombia, eso implica muchas armas, mucho poder destructivo y Costa Rica no se preocupó por poner un pie en la negociación de esos acuerdos y estar muy informada. Estamos en el último cuarto de oxígeno donde nos permite resolver esto de una manera civilista. 

 

PERIODISTA:

CRÉDITOS: Fotos: Cristian Cartín

EMAIL:

Miércoles 14 Junio, 2017

HORA: 12:00 AM

Enviar noticia por correo electrónico

SIGUIENTE NOTICIA