La Sala Constitucional acogió para estudio un recurso de amparo interpuesto por la Defensoría de los Habitantes, que tiene como propósito ordenar a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) suministrar un medicamento que requieren dos mujeres, hermanas, que padecen la enfermedad de Pompe, la cual está calificada dentro del grupo de “enfermedades raras”.
Esta condición es hereditaria y de baja incidencia y se caracteriza por la deficiencia de una enzima conocida como alfa-glucosidasa ácida de los lisosomas; que se traduce en una serie de padecimientos en la salud de estas mujeres, los cuales les impiden llevar una vida normal.
“En su argumentación ante el Tribunal Constitucional, la Defensoría expuso que la enfermedad de Pompe genera a estas hermanas problemas en los músculos, el corazón y los pulmones, les causa dificultades para levantarse, para agacharse y para realizar las tareas del hogar. Además, se ven obligadas a desplazarse con bastón, con el consecuente riesgo que significa al movilizarse en transporte público, especialmente para acudir a las citas médicas de especialidades como cardiología, neurología y rehabilitación. Sumado a ello, las afectaciones y el desgaste emocional que representa padecer una enfermedad rara, incurable y respecto a la cual, se sienten indefensas en cuanto a tratamiento”, indicaron en un pronunciamiento oficial.
En el año 2014 estas mujeres presentaron recursos de amparo a fin de solicitar que se ordenara a la CCSS proveerlas del medicamento (Myozyme); no obstante, se declararon sin lugar porque el Tribunal Constitucional basó la resolución en un informe rendido por la CCSS (Comité Central de Farmacoterapia), que refirió presuntos riesgos en torno a la aplicación de ese medicamento y señaló que el mismo aún estaba en fase experimental.
Ante este panorama, la Defensoría realizó gestiones a efectos de verificar la situación del fármaco tanto a nivel nacional como internacional, y trasladó a los magistrados los hallazgos obtenidos y nueva evidencia médica científica sobre el beneficio significativo del tratamiento en la calidad de vida del paciente.
Así las cosas, el ente defensor solicitó a la Sala Constitucional tomar en consideración los insumos recabados por la institución y ordenar a la CCSS la compra del medicamento que las mujeres requieren para sobrellevar su enfermedad, aliviar sus múltiples padecimientos, y tener una mejor calidad de vida.
La Sala Constitucional también pidió a las autoridades de la CCSS un informe completo de la situación para analizar este caso.
