Sobrevivir a dos impactos de bala de AK-47 fue el primer reto para un niño de 10 años identificados como Dereck que tras sobreponerse a esa difícil situación se logró convertir hoy en bombero por un día.
El bonito gesto del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Costa Rica lo realizaron en la estación de Pavas de donde es vecino el pequeño que llego con toda su familia y un amigo a disfrutar el día.
Los Bomberos tenían listas diferentes actividades incluido un simulacro, charlas y un almuerzo.
Los violentos hechos en los que el menor resultó herido ocurrieron en diciembre de 2014, cuando un hombre en una motocicleta empezó a dispara contra una vivienda pero dos balas de Ak-47 lo impactaron en la espalda.
"Quiero ser bombero para salvar gente, no había podido tener la experiencia porque tenía dos barrerás en la espalda y no podía crecer mucho, por lo pequeño tenía miedo de no poder ser bombero" contó Dereck en un video publicado en redes sociales.
Las autoridades no descartan continuar realizando este tipo de acciones.
