En la cancha las ticas desconsoladas, con lágrimas en los ojos, tiradas en la gramilla tras el pitazo final... La derrota por 0-1 contra Italia deja a la Selección Femenina Sub17 fuera del Mundial que organizamos.
En las gradas la afición aplaudía a las guerreras, que nunca dejaron de luchar, que siempre corrieron, se entregaron. Por eso las lágrimas, porque sudaron la camisa en la cancha.
El sábado jugarán de nuevo para despedirse de la cita en un partido de trámite contra Zambia, que también quedó eliminada del torneo.
MUCHO ESFUERZO, POCO FÚTBOL
Las ticas se mostraron nerviosas en las primeras de tanteo, la presión por estar con la soga al cuello, ver el estadio con una cantidad importante de público, provocó pánico escénico en las muchachas. Se les notaba a la hora de darle pase o salir a marcar.
Lo que no dejaron en el vestuario y cargan bien estas chicas son las ganas, la entrega, la lucha, el espíritu combativo, el correr todos los balones.
Son aspectos necesarios en el fútbol, pero también se necesita el complemento: técnica, visión de juego, conceptos tácticos, y a esta selección que dirige Juan Diego Quesada le falta esa parte esencial para ganar un partido y exhibir una cara más sólida en la Copa del Mundo.
La portera italiana, Francesca Durante, fue una espectadora más, tocó pocos balones, la mayoría solo para saques de meta. A Costa Rica le costaba un mundo penetrar la fuerte zaga italiana, cuando llegaba al último cuarto de cancha se quedaba sin ideas y era fácil presa.
Gloriana Villalobos, la talentosa del grupo, lo intentó de forma individual, pero sola era difícil encontrar el camino a la portería contraria. Ella volvió a demostrar que tiene grandes condiciones pero le falta más acompañamiento para aprovecharlas mejor.
Las italianas eran mucho más altas y fuertes, desde ahí empezaron a ganar el partido. En el juego al choque se veían muy superiores, por lo que a la Tricolor le tocaba bajar la bola al piso y sacar esa técnica que caracteriza al fútbol costarricense.
Tras recibir metralla, Gloria Marenelli abrió la cuenta al pegar la pelota de volea en cobro de tiro de esquina. La número 11 apareció sola y tuvo la facilidad de conectar la redonda y ponerla en el ángulo (19').
Desde el gol hasta el descanso el partido solo tuvo una cara: azul y blanco. Las nuestras lo intentaban pero de forma desordenada, más por el instinto de salir y luchar que por otra cosa.
Para el complemento la Sele mostró las mismas agallas, con las que se echó a la afición en el bolsillo desde el primer partido, pero sumado a mejores combinaciones.
Por ratos metió a las europeas atrás, sin encontrar la manera de llegar al empate y mantener la ilusión de clasificar a cuartos de final. Los goles nunca llegaron y las ticas le dicen adiós al Mundial.
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CRÉDITOS: Foto: Mauricio Aguilar
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Miércoles 19 Marzo, 2014
HORA: 12:00 AM
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