Muchas veces, los padres de familia encuentran en los dispositivos electrónicos al mejor calmante para los niños inquietos, pero ¿es saludable esta práctica? ¿Qué se debe hacer para evitar una adicción a la tecnología?
La psicopedagoga María José Roldán explica que no es malo que los pequeños de la casa se adapten a las nuevas formas de entretenimiento, pero hay que empujarlos a disfrutar de juegos más activos.
“Una forma de que un hijo no se convierta en un adicto a la tablet es mantener el aparato siempre en un lugar donde la familia pueda acceder libremente, como por ejemplo la sala. De este modo, podrá vigilar qué es lo que hace y qué está jugando cada momento”, explicó.
Además, Roldán recomienda limitar el tiempo que los niños jueguen con el dispositivo. De esta manera, podrán disfrutar de otras actividades que se pueden realizar al aire libre.
“Cuando el niño es adicto a la tablet no podrá entender que existirán normas y límites, sobre todo cuando nunca antes las ha habido. Es necesario avisarles con tiempo cuándo es el momento de jugar o no. Para evitar rabietas antes de finalizar el tiempo, hay que avisarles 10 minutos antes de que tenga que apagarlo”, recomendó la especialista.
Para Roldán, otro aspecto fundamental es la autoridad de los padres. Los adultos deben dejar claro que los hijos no pueden tener su propia tablet, sino que debe estar bajo la supervisión de los más grandes de la casa.
Esto va ligado a motivar a los hijos a realizar otro tipo de actividades.
“Cuando restrinjas el uso del aparato, hay que asegurarse que los hijos puedan hacer otra actividad y que no tenga un teléfono inteligente en el bolsillo. Hacer deporte, pasear o andar en bici son buenos ejemplos”, indicó.
Y, como los niños aprenden todo de los papás, se debe predicar con el ejemplo.
“Hay que desconectarse de tanta tecnología y pasar tiempo de calidad con los hijos”, concluyó.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Sábado 19 Octubre, 2019
HORA: 12:00 AM
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