Fernando Naranjo llegó hace cuatro años a la silla de la Gerencia General del Banco Nacional, su nombramiento se vence hasta el 2016, sin embargo, el Gobierno está valorando si el jerarca se alinea a las pretensiones del presidente Luis Guillermo Solis o de lo contrario llegará a un acuerdo para su salida.
El ministro de la Presidencia, Melvin Jiménez, confirmó que Naranjo y Solís han sostenido encuentros y se mantienen las conversaciones.
“El interés del Gobierno es tener a todas las personas de juntas directivas y gerentes alineadas con el Gobierno (…) Si las personas aceptan y se alienan a nuestras políticas caminaremos con ellos”, sostuvo Jiménez.
Aunque Jiménez está claro que jurídicamente no lo pueden remover, sí están confiados en alcanzar un acuerdo con Naranjo.
Ayer la Junta Directiva del Banco Nacional hizo pública su preocupación, pues de siete miembros que la conforman, a 4 se les vence el plazo el 31 de mayo y lo común, según el presidente de la entidad, Alfredo Volio, quien justamente deja su puesto, es que a estas alturas ya conocieran las nombres para un transición más efectiva.
Además de Volio, culmina la vicepresidenta Janina Del Vecchio y los directores Juan Luis Corella y Rodolfo Quiros.
