Caracas, (SEP) - La escasez en Venezuela alcanzó a la Iglesia Católica, la cual se quedó sin vino hace pocos días y ahora tampoco hay harina de trigo para que las hostias sean elaborados. Por lo tanto, las autoridades religiosas valoran reducir la cantidad de misas.
“La reserva de vino que tenemos en Mérida es de dos o tres meses, mientras que la de hostias es muy poca por su alto consumo y porque las monjas que las hacen tienen enormes dificultades para conseguir la harina de trigo”, explicó Monseñor Baltazar Porras, obispo del estado Mérida (oeste).
La situación afecta a los más de 10.000 feligreses que frecuentan las iglesias del país. La mayoría de los 29 millones de venezolanos profesa la religión católica, entre el 70% y el 90%.
Muchos sacerdotes de la zona andina analizan, entre algunas medidas, la compra de los productos al estado colombiano fronterizo, aunque consideran que esto no resuelve la escasez y el Gobierno debe actuar primero.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Jueves 30 Mayo, 2013
HORA: 12:00 AM
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