PREGUNTA: Alejandro José Martínez Obando (Cartago). Soy de liguista y me agradaría conocer información sobre el rojinegro Rodolfo Mills, en el fútbol del país y la Selección Nacional.
RESPUESTA: Rodolfo Mills Palmer se distinguió por una trayectoria impecable de 16 años, como un defensor y volante de contención de gran categoría y corpulencia física impresionante, que sus rivales no lo podían superar y no cualquiera se animaba a pasar por su parcela.
Nacido el 25 de mayo de 1958 en Limón, se inició en las clásicas mejengas que se organizaban en las calles de los barrios del Atlántico y luego se vinculó a su primer equipo, Deportivo Cavallini, en categoría infantil.
De inmediato pasó a formar parte en 1974 de la Selección Juvenil de Costa Rica, a cargo del técnico Rogelio Rojas, que participó sin éxito en el Norceca de la Concacaf en Ottawa, Canadá.
Ese mismo año, el técnico español Antonio Moyano lo integró a la Primera División de Limón FC, con el que debutó en 1975 cuando apenas tenía 17 años. Con una nueva convocatoria a la Selección Juvenil en 1976, se mantuvo con los limonenses hasta 1977, cuando pasó a la Liga Deportiva Alajuelense. Allí estuvo en dos períodos, uno que finalizó en 1981, y otro entre 1984 y 1986.
Un penal suyo anotado al arquero brasileño Nery de Souza en un clásico Alajuelense-Saprissa (2-2), el 7 de octubre de 1979, resultó polémico porque se lanzó 13 días después, el 20 de octubre, luego de una trifulca y castigos a jugadores morados por agredir al árbitro Carlos Manuel Álvarez.
Con los rojinegros campeonizó en dos ocasiones en el torneo nacional, en 1980 y 1984, y alcanzó el título de la Concacaf en 1986.
Registró un lapso como legionario con el Motagua de Honduras, en 1981; se vinculó en 1987 al Herediano y luego con Saprissa en la pentagonal final, mientras que estuvo otras dos veces con Limón FC, de 1982 a 1983 y de 1988 a 1990, año de su retiro el 2 de setiembre en el partido en el cual Limón cayó 0-2 con la Liga en Alajuela.
Aunque era un jugador muy fuerte, pero no malintencionado, era capaz de inventarse jugadas extraordinarias durante su carrera, como un golazo de cabeza con Saprissa al Municipal Puntarenas en el estadio Ricardo Saprissa, que dejó sin palabras a propios y extraños.
Según Gerardo Coto, de la Unafut, registró 467partidos y 50 goles en la Primera División tica, con 151 juegos y 11 tantos con Limón, 297 choques y 38 dianas con la Liga, 14 partidos con Herediano y 5 juegos y un gol con Saprissa. Integró la Selección mayor en 18 oportunidades y anotó cuatro tantos, entre 1980 y 1985.
Hoy, a sus 61 años, vive en el Barrio San Juan de Limón. Por casi 25 años radicó y laboró en Pasadena, California, Estados Unidos. Volvió al país hace siete años, trabajó en Japdeva y está cerca de pensionarse. Casado cuatro veces, tiene cinco hijos (Rodolfo Joel, Rosalyn María, Margaret, Susana y Kerny) y dos nietos. Entre sus pasatiempos está disfrutar con su familia y salir a pescar.
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