La Contraloría General de la República detectó que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) hizo compras a generadores privados de energía en una totalidad de 23 contratos para los cuales no fundamentó la necesidad o decisiones para ejecutar esa erogación.
Esos contratos subieron a un monto de ¢2.049 millones, de acuerdo con una reciente auditoría del Área de Servicios Ambientales de la Contraloría General de la República (CGR), que justamente también señala que la institución tiene una seria deficiencia en cuanto a la supervisión sobre 7 plantas de energía eólica que pasarán a manos de la entidad cuando venzan los contratos de explotación.
“Las contrataciones que efectuó el ICE entre el 2010 y 2018, que corresponden a 19 renovaciones de contratos de compra de energía a privados, así como 11 contratos nuevos de BOO y 2 de BOT, no constan las motivaciones de orden técnico, económicos, ambiental, social y de oportunidad que respaldan la conveniencia de la decisión de ejecutar dichas compras”; reza el informe del ente contralor en su punto 2.38.
La Contraloría además abordó los aspectos referentes a la metodología que justamente establecía las tarifas que debía pagar el ICE a esos cogeneradores privados en cuanto a energía que se produce con el viento.
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Viernes 20 Septiembre, 2019
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