Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvieron a un hombre de apellidos Araya Arias, alias “Gato Félix”, y su cómplice por la sustracción de una corona de piedras preciosas y dos custodias (lugar donde se coloca la ostia durante la exposición del Santísimo) de la iglesia de San Joaquín de Flores, en Heredia.
La captura del sospechoso, de 79 años, se efectuó en su vivienda, ubicada en Barrio México, San José, y la su compinche el sacristán de apellidos Rivera Pérez, de 59 años, en San Joaquín de Flores, donde la policía decomisó un arma de fuego, el saco donde se llevaron lo sustraído, llaves, objetos punzocortantes y las vestimentas que al parecer usaron los sospechosos el día del atraco (8 de abril de 2019).
Se cree que en ese momento Araya Arias llegó en un carro y se puso varias prendas para ocultarse, además en apariencia utilizó un bastón para fingir una discapacitad e ingresó a la iglesia.
ABUELO DE LOS LADRONES
De acuerdo con las autoridades, “Gato Félix” fue detenido por primera vez en 1974, cuando ingresó a la Penitenciaria Central y desde entonces ha estado tras las rejas por delitos como secuestro, violación, extorsión, homicidios y robos.
El sacristán Rivera Pérez residía muy cerca del lugar del robo y se desempeñaba como voluntario en la iglesia desde hacía un mes aproximadamente, presuntamente habría realizado labores de inteligencia y vigilancias a los accesos para que su compinche diera el golpe.
Francisco Vásquez, investigador del OIJ, aseguró que Araya Arias es especialista en abrir cerraduras y cajas fuertes en cuestión de minutos. En este caso no fue la excepción y no tuvo mayor dificultad para entrar y salir del templo sin ser detectado y de manera muy ágil colocó las delicadas piezas de oro, valoradas en ¢30 millones, en un saco.
“Gato Félix” cuenta con antecedentes por tres delitos contra la propiedad y Rivera Pérez un antecedente por el mismo delito. Ambos fueron presentados ante el Ministerio Público, donde solicitarán prisión preventiva por el nuevo delito de hurto agravado, ya que no hubo fuerza ni violencia para sustraer las reliquias.
Trascendió que tras el robo Rivera Pérez desapareció de San Joaquín de Flores, donde residía, lo que complicó su ubicación por parte de los investigadores y con ello el atraso en los allanamientos, que debían ser simultáneos.
VALOR INCALCULABLE
Luis Hernández, vocero de la Iglesia, manifestó a DIARIO EXTRA que únicamente el sacristán y el sacerdote tenían acceso a la bóveda donde estaban los objetos sustraídos.
“No se tiene fácil acceso, no todos los días se abre el recinto, solo los jueves en la hora santa de la mañana y cuando llegó el sacristán se percató del faltante, por lo que notificó al sacerdote lo sucedido y se presentó la respectiva denuncia.
Aparentemente al mediodía se dieron los hechos, justo cuando el sacristán salió a almorzar. Fueron directo al lugar donde estaban dos custodias (lugar donde se coloca la ostia durante la exposición del Santísimo) y la corona de la Virgen”, explicó.
Agregó que hace algunos años el templo, que tiene 129 años de construido, fue víctima de un robo.
“Las piezas tienen un baño de oro y una de ellas tiene más de 100 años, el valor histórico y religioso es incalculable. Son artículos pesados y el robo se dio en una época que se hacía cambio de sacerdote en la parroquia, así como de personal”, recalcó.
LO CONOCIÓ SIENDO MENOR
Alcides Fallas Corrales narró a El Periódico de Más Venta en Costa Rica que en 1958 conoció al “Gato Félix” en la primera cárcel donde estuvo recluido.
“Cuando tenía 25 años trabajé en la Penitenciaría y él estaba en el pabellón de menores, era inquieto, pero no se metía en problemas con nadie a lo interno del penal, vestía bien y tenía su grupo de amigos que siempre andaba con él.
Conocí a Juan Luis Araya Ballestero, ‘Pico de Lora’, y Los Hijos del Diablo. Era un carajillo, hablaba mucho con los reos y ahora vengo a darme cuenta de que lo detuvieron nuevamente por el robo a la iglesia”, narró.
Agregó que a raíz de lo sucedido pasa cerrada.
“Antes pasaba abierta, llegaba mucha gente a visitar el Santísimo, ahora la abren para las celebraciones de la misa, ahora hay un guarda que cuida y hasta hicieron una caseta, de noche no queda nadie”, acotó.
Las últimas detenciones de “Gato Félix” se efectuaron en San Ramón de Alajuela por tentativa de robo simple, en San Carlos por robo agravado, en Liberia por tentativa de robo agravado, en San José por ofrecimiento fraudulento y en Santa Cruz por robo simple.
CURRÍCULUM DEL GATO FÉLIX
20 de mayo de 1974
Le dictaron una sentencia por encubrir un robo, que fue una multa para evitar ir a la cárcel.
9 de noviembre de 1977
Lo condenaron a 8 años de prisión por el secuestro extorsivo de una mujer de apellido Castro. En 1982 quedó libre.
1 de febrero de 1985
Lo condenaron a 3 años de cárcel por el delito de receptación.
31 de octubre de 1986
Lo condenaron a 3 años de prisión por receptación.
1 de octubre de 1987
Lo condenaron a 17 años por homicidio calificado y tentativa de robo.
18 de octubre de 2000
Lo condenaron a 3 años de cárcel por hurto agravado, pero le dieron el beneficio de ejecución condicional de la pena.
21 de julio de 2004
Permaneció 2 meses a la orden del Juzgado Penal de Grecia por tentativa de robo agravado.
13 de octubre de 2006
Estuvo 1 mes en prisión por violación.
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CRÉDITOS: Fotos: Mauricio Aguilar y OIJ
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Jueves 19 Septiembre, 2019
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