La Policía Municipal de Escazú capturó a José Efraín López Mendoza, alías “M1”, un poderoso narcotraficante, líder del clan Movimiento Revolucionario de Crimen Organizado (Moreco) y vinculado al Cartel de Sinaloa y otras agrupaciones internacionales.
López viajaba en el Toyota Hilux placas 252992, el cual era conducido por Geovanni Peraza Castillo, quien al ver que un policía le pidió detenerse en un operativo no acató la orden y eso desencadenó una persecución.
Byron Fonseca, jefe de la Policía Municipal, explicó que el conductor intentó tirarles el vehículo a sus compañeros y eso provocó el despliegue policial hasta detenerlo cerca de Multiplaza, sobre la autopista Próspero Fernández.
“Las personas que viajaban en el carro se reducen a la impotencia, dos unidades del OIJ ayudan a los oficiales y se logra individualizarlos. En el vehículo viajaban dos hombres y una mujer. Dentro del proceso de investigación corrobora que una de las personas, de apellidos López Mendoza, tenía identidad falsa y tras cotejar se descubre que tiene orden de captura a nivel internacional y queda a las órdenes del OIJ”, dijo Fonseca.
El pick up está registrado a nombre de Finca Yarelina del Caribe S.A., ubicada en Cairo de Siquirres. Familiares del chofer y custodio Peraza Castillo aparecen como miembros de esa sociedad anónima.
VINCULADO A PELLEJA
Pero ese no es el único vínculo que tienen estos sujetos con el Caribe y asuntos sospechosos, pues Peraza Castillo está casado con una exregidora de la Municipalidad de Siquirres de apellido Myrie, a quien hace varios años la policía vinculó con los helipuertos clandestinos que operaban en las barras de Limón.
En esas fincas donde se construyeron las pistas clandestinas se gestaba parte de la operación de otro de los narcos criollos más temidos como es José Arnoldo Díaz Castro, alias “Pelleja”.
Myrie fue investigada por el traspaso de una finca, helipuertos y droga que Pelleja mandaba al norte del continente.
De hecho, en agosto de 2015 seis compinches de Díaz Castro fueron condenados por el delito de tráfico internacional de drogas.
Pese a todos estos antecedentes, las autoridades dejaron en libertad a Peraza Castillo y la nicaragüense Flores Castro, de 19 años, quien viajaba en el asiento trasero del Toyota Hilux.
CODIGOS DE CARTELES
López Mendoza era el narco más buscado por el OIJ, FBI, DEA y DIS tras ser considerado el líder de Moreco, cuya ideología es darles sentido a sus actividades.
Sus códigos son adaptaciones de los que usan los carteles mexicanos de la droga como Los Zetas y el Cartel de Sinaloa, y tienen algunas palabras que los identifican y representan, según su perspectiva criminal, como el honor, el orgullo y la lealtad.
Precisamente la banda, al mejor estilo de organizaciones criminales internacionales, se identificaba con la letra inicial de su nombre y un número, de ahí que López Mendoza era conocido con el alias de “M1”, pues era el número 1 de la organización.
El líder de Moreco tenía contactos en México y Estados Unidos para la comercialización y precio de la droga. También tiene un alto perfil internacional y lo investigan en diversos países.
M1 es oriundo de Pococí, Guápiles, y tenía cerca de dos años de vivir en una casa dentro de una propiedad grande en Grecia, donde desarrolló un negocio de venta de ganado, con el cual según la policía trabajaba en el lavado de activos.
CAMBIOS FÍSICOS
El perfil de López Mendoza era alto, como el de un hombre de negocios, pese a la actividad que se le conocía desarrollaba en apariencia con el narcotráfico, pues normalmente se sabe que los capos tratan de pasar inadvertidos.
De hecho, con el paso del tiempo fue adoptando cambios en su aspecto físico, pasó de tener bigote y llevar un corte de cabello estilo militar a rasurarse, raparse o bien dejarse crecer el pelo. Este martes, tras su detención, llevaba el cabello teñido de rubio.
PERIODISTA: Alexander Méndez
CRÉDITOS: Fotos: Isacc Villalta
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Miércoles 14 Agosto, 2019
HORA: 12:00 AM
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