El derbi de la Ciudad de los Mangos entre Carmelita y Alajuelense, que se disputó en el estadio Rafael Bolaños, fue empañado por un penal claro que el árbitro Keylor Herrera no pitó al minuto 92 a favor del equipo local. Esa acción pudo cambiar la historia de un partido disputado entre dos escuadras que se presentaron con el cartel de obligadas.
El pulso quedó tablas (1-1), resultado que perjudica tanto a carmelos como a manudos. En el caso de los de la barriada el empate los deja muy comprometido en la lucha por el descenso, que se resolverá el domingo 28 de abril en la última jornada del torneo de Clausura. Mientras que la Liga ya no depende de sí mismo para clasificar a semifinales; es decir, tendrá que ganar los dos juegos que le quedan y esperar que otros resultados se le den para meterse entre los cuatro primeros.
Fue el Saprissa quien se benefició de forma directa con este empate, ya que firmó su boleto a la ronda decisiva.
HORROR ARBITRAL
La Liga se puso al frente en la pizarra muy rápido en el juego, Apenas a los 47 segundos de la etapa inicial abombó las redes de la portería defendida por Kevin Chamorro.
Parecía que el gol sería el patín que tanto necesitaba el plantel que dirige el colombiano Hernán Torres para buscar los 3 puntos que lo mantuvieran cerca de los puestos de clasificación, pero se encontró con un combativo cuadro verdolaga que debía puntuar sí o sí para evitar un descenso prematuro.
Los carmelos apostaron por una presión intermedia para buscar el contragolpe con hombres rápidos por los costados. Así mantuvo a raya a los futbolistas pensantes de la Liga, como son López, Anthony y Alexander. Además les puso freno a las alas alajuelenses, Lassiter y Guevara.
Alajuelense saltó a la cancha con un 1-4-1-4-1, teniendo al catracho Róger Rojas en punta. Eso significó que el argentino Zabala se quedara fuera de lista al tener el cupo de extranjeros lleno.
El cuadro rojinegro nunca se sintió cómodo en la cancha, sus principales figuras no aparecieron, lo que le permitió al rival verse mejor, principalmente en la segunda mitad, con solo agregarle hormonas a su fútbol.
En un pulso muy pausado las faltas fueron recurrentes, debido a la presión de las dos oncenas por ganar. La virtud de los carmelos fue no desanimarse con el gol tempranero y terminó emparejando la cuenta al 45’ con una anotación de Bernald Alfaro de penal.
Para el complemento Carmelita mereció más, pero no tuvo la capacidad para cerrar bien las jugadas que fabricó, mientras que Alajuelense no tuvo la actitud ni la calidad de un equipo que estaba urgido por ganar.
Al minuto 92 el central se comió un penal a favor de los carmelos, que pudo inclinar la balanza. Así con el empate carmelos y rojinegros quedan mal parados para el cierre del certamen.
