Luego de que DIARIO EXTRA cuestionara la designación de Norman Lizano Ortiz como embajador de Costa Rica en Brasil, pues no habla portugués, el diplomático reaccionó echándose al pico a su compañera Lilliam Rodríguez Jiménez, quien fue nombrada en Rusia.
A la nueva embajadora la eligió el presidente Carlos Alvarado, a pesar de que no domina el idioma oficial de esa nación que abarca territorios de Europa y Asia. Lo anterior consta en sus atestados.
En son de burla y completamente impropio de un embajador de carrera, Lizano envió un mensaje de texto pidiendo que consultáramos si Rodríguez manejaba el ruso, así como él no habla portugués, tan solo “portuñol”.
El texto lo envió el miércoles 3 de abril, a dos días de la publicación. Un día antes, el martes, también llamó amenazando que iba a denunciar a este medio por haber relevado la información.
La situación fue conocida por el jefe de prensa de la Cancillería, Miguel Díaz, quien simplemente dio el check de recibido.
CARENCIA
El Ministerio de Relaciones Exteriores, mediante correo electrónico, confirmó que Rodríguez habla español como su lengua materna, francés (idioma que lo estudió en la Alianza Francesa) e inglés (que lo sacó en el Instituto Británico).
La funcionaria, quien se encuentra en uno de los rangos más bajos del escalafón (tercera secretaria), ingresó a la Casa Amarilla el 1 de junio del 2004.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, dirigido por Manuel Ventura, la nueva jefa de la misión en Rusia es abogada y notaria con una maestría en diplomacia.
En el último año se desempeñó como ministra consejera y cónsul general en Bolivia. Hasta este año ejerció como encargada de negocios de Costa Rica en esa nación suramericana.
La designación de embajadores que no dominan fluidamente el idioma del país al que son enviados fue defendida por el presidente Alvarado y el canciller Ventura.
En relación con Lizano, el mandatario dijo que constitucionalmente puede seleccionar a quien él crea conveniente para que represente a la nación.
Al igual que el titular de la Casa Amarilla, el jefe de Estado dijo que en Brasil de por sí hablan “portuñol” y que, entre las tareas del designado, quien tendrá un salario de aproximadamente ¢7,7 millones, está aprender el idioma oficial.
“Como hay misiones como China, Japón y Corea, donde el tema de idiomas es difícil per se, incluso para esas no es requisito hablar ese idioma. En el caso de don Norman, si bien no habla fluidamente aún el portugués, entre sus tareas será ir a fortalecer esa destreza. Él tiene todo lo necesario para ejercer como embajador”, había defendido Alvarado.
PERIODISTA: Marco Antonio González
EMAIL: [email protected]
Lunes 15 Abril, 2019
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA