Solo visitó la discoteca dos veces para saber que la compraría. Se trata de Omar Rivera, abogado de la Procuraduría General de la República (PGR) desde hace 33 años, quien está a punto de retirarse. Este empresario también siembra frutas y madera en el Caribe.
¿Por qué compró Pepper’s?
- Siempre me ha gustado la música. La idea es hacer la sala de eventos número uno de San José. Ya empezamos con las remodelaciones.
¿Cuál es el plan?
- Que sea la sala número uno de eventos de la capital. No existe dónde bailar en San José, es increíble, entre más academias de baile hay, menos lugares donde bailar. La idea mía es rescatar eso. Solo existe un salón en Desamparados y otro en El Pueblo. Vamos a hacerlo bien bonito. Ya empezamos con las oficinas y la cocina. Faltan muchas cosas.
¿Cuánto pagó?
- Una cifra importante (risas).
¿Más de ¢200 millones?
- Mucho más que eso, mucho más. Esto es un negocio que no solo sumó el nombre, sino que compré la propiedad.
¿Usted qué hace?
- Soy abogado y tengo varios negocios. Estoy a punto de jubilarme. Soy procurador del Estado.
¿Cómo decidió comprar la discoteca?
- Yo ni la conocía, es la verdad. Vine como dos veces y me la ofrecieron. Yo también soy músico, toco la guitarra. La gente tiene que ver que Pepper’s es una sala de eventos y las empresas pueden alquilarla para hacer sus fiestas. Oficialmente, la compré en setiembre del año pasado, pero la administración empezó a partir de enero. Soy vecino de Curridabat y desde 1986 trabajo en la Procuraduría.
¿Qué pasará con los precios?
- Se va a mantener todo popular. Una cerveza ¢1.500 y las bocas ¢2.500 en adelante. Vamos a tener domingos de salón a ¢4.000, siempre música en vivo. Los domingos vienen muchos adultos mayores y tenemos que abrirnos para todas las edades. Acá voy a estar yo con mis hijos.
PERIODISTA: Ariel Chaves González
EMAIL: [email protected]
Martes 12 Febrero, 2019
HORA: 12:00 AM
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