Lo mejor es tener las cosas claras
Editorial
Los abuelos tienen el dicho “cuentas claras, chocolate espeso”, que siempre es muy acertado cuando existen dos partes en un conflicto o se habla de la relación de un paciente y su médico.
Por dicha las autoridades en cuestión ya dejaron claro que quienes vayan a consulta o visiten los nosocomios para una emergencia tienen la posibilidad de grabar al médico sin que este alegue prohibición.
Gracias a esto puede determinarse cuál de las partes tiene la razón. Muchas veces los pacientes alegan negligencia y los galenos falta de paciencia por parte de ellos; así, de esta manera, las autoridades podrán definir quién está en lo correcto.
A pesar de que el país está en recesión, sería una buena idea que Salud decida invertir en cámaras en los consultorios. Tal vez de esta manera los médicos que no tienen tanta vocación decidan cambiar de actitud para evitar un problema.
Muchos galenos se quejan porque los tratan mal, ventilan sus maltratos en las redes sociales, los denuncian ante la dirección del hospital para el que trabajan y muchas veces ante las instancias judiciales. Con los videos ambas partes podrán verse beneficiadas, pues habría pruebas.
Algunos ya pueden pensar que se trata de un tema de persecución o que la gente está buscando cómo hacerles daño, pero es que nos topamos con cada caso que hasta da cólera y al parecer muchos de ellos estudian por el dinero, no por la intención de ayudar a sus semejantes.
¿Habrá que recordarles periódicamente que dicha carrera es de vocación y no de horarios como muchos piensan, que la gente llega a verse al hospital porque se siente mal, no por ir a molestar a nadie?
Muchos de los que estudian Medicina deberían sentarse y analizar a conciencia si van a ser buenos profesionales, de los que harán la diferencia. De no ser así, que se matriculen en otra carrera porque malos doctores ya sobran.
Los usuarios deberíamos empoderarnos y no dejar de denunciar porque es deber de todos ventilar las anomalías y los maltratos que se producen en los hospitales. Veremos si cuando tengan varias quejas de un doctor actúen según lo que corresponda y no se quede en un jalón de orejas o un pellizco de la abuela.
Esto nos hace cuestionarnos si de verdad piensan que la gente vaya a aprender rebajándole dos días de salario, ¡quién dijo que eso era un castigo ejemplar para que el resto de colegas sepa que no hay horarios cuando se decide estudiar Medicina!
Por esa y muchas razones es que se siguen cometiendo atrocidades con los asegurados y los doctores no tienen temor a ser sancionados.
Se niegan a atender a la ciudadanía, no se levantan del escritorio para examinar a los pacientes, los ven a la patada y algunos hasta se dan el lujo de ir a sus consultorios privados en horarios laborales, los cuales son pagados por todos aquellos a quienes les rebajan seguro mes a mes.
Este tipo de sanciones es como darles una palmadita por la espalda y decirles “todo está bien, mi chiquito, lo que hizo está bien”. Sin lugar a dudas cada día se comprueba más que los asegurados estamos desprotegidos.
No se puede echar todos en el mismo saco, pero por unos pocos que les gusta jugar de importantes ya muchos tienen ese prejuicio de que los galenos son malos profesionales, sin embargo tomemos en cuenta que bastantes sí tienen vocación y sí ponen todo su amor a la hora de trabajar.
No dejemos de denunciar porque es deber de todos ventilar las anomalías y los maltratos que ocurren en los hospitales.
Autoridades, arreglen estas cuestiones con rigurosidad, no con jalones de orejas.
