La final del torneo de Apertura 2018 de la Liga de Ascenso fue una fiesta total en el estadio de la Asociación Cívica Jicaraleña. El último juego del campeonato llegaba con el mayor suspenso posible, el marcador global era de 1-1 y todo parecía indicar que la mesa estaba servida para un partidazo.
Eso sí, la afición visitante se apoderó del reducto de la península. Los guanacastecos tiñeron de rojo y verde las graderías del estadio de Jicaral, desde ahí comenzaron ganado los de Nicoya.
El clásico de la península, ese fue el nombre que le dieron al vital cotejo. Jicaral llegaba con la ventaja de la experiencia en finales anteriores y futbolistas con mucho recorrido, pero al final pesaron más la parte mental y ese fantasma que los atormenta e impide que no ganen en estas instancias.
Mientras que la Asociación Deportiva Guanacasteca no llegaba a una final desde 2015, cuando la perdió contra AS Puma, pero el plantel rejuvenecido que muestra sacó la cara como visitante.
Los 34 grados de temperatura a las 11 a.m. abrasaron a ambas escuadras, desde el inicio se notaba el desgaste de los futbolistas, pero al final un equipo tenía más hambre de triunfo que el otro.
La Furia de la Pampa empezó ganando el juego. A los 11 minutos de acción José Pablo Córdoba hizo la primera anotación del juego, después de un gran pase del capitán Carlos Ochoa. Quedó solo frente al portero Néstor Mena y su tiro colocado besó las redes.
Una locura total se desató en Jicaral. Serpentinas volaron, el humo verde y rojo empañó la vista de toda la afición y ese gol les dio el empuje necesario a los guanacastecos para adueñarse del partido.
Jicaral intentó penetrar el ordenado bloque defensivo de Guanacasteca, pero fue imposible. Leonardo Adams fue el jicaraleño que tuvo la acción más clara para igualar las acciones, pero le faltó calma para definir.
El Huracán lució irreconocible. Pasivo en la mediacancha y su figura principal, Walter Chévez, no apareció para tomar el control del mediocampo. Por esta razón los pelotazos fueron el arma principal de Jicaral, estrategia que no resultó efectiva.
La segunda etapa fue un recital de Guanacasteca. La buena condición física que mostraron sus hombres se impuso y en los primeros minutos ampliaron su ventaja. Córdoba se llenó de confianza y pegó el balón desde un tiro libre para regalarle un golazo a su afición.
Jicaral no se quedó de brazos cruzados y de la mano de Kennedy Rocha descontó en el juego.
Sin embargo cuando mejor jugaban los jicaraleños y parecía que el empate caía, la experiencia y la maña de Yosimar Arias dijeron presente. Después de un pase que recibió dentro del área, bajó la pelota y la mandó al fondo de los cordeles. Con el 3-1 el juego estaba definido, la actitud de los 22 jugadores en el terreno lo decía.
Para rematar la serie Ochoa anotó desde los once pasos. Mena adivinó el lanzamiento, pero no fue suficiente para detenerlo. Con esto se concretó el global de 5-2 a favor de Guanacasteca.
Después del pitazo final, aficionados de Jicaral empañaron la fiesta al atacar a golpes al delantero Adams. El incidente no pasó a más, pero sí lastimaron al futbolista.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
CRÉDITOS: Jason Solano Herrera Colaborador
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Lunes 17 Diciembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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