Asaltantes, drogadictos y ladrones comunes siembran el terror entre la población civil. Ciudadanos de las barriadas al sur de la capital aseguran que les exigen un cobro extra durante este mes cuando pasan por ciertos sitios, caso contrario los amenazan y hasta golpean. Para las autoridades, estos maleantes se trasladan en motocicleta para efectuar dichos ataques, andan armados y siempre son dos personas. El acompañante ejecuta el delito en cuestión de segundos, por lo que la presencia de la Policía en moto en este tipo de sectores resulta vital para contrarrestar la acción criminal.
Michael Soto, ministro de Seguridad, aseguró a DIARIO EXTRA que el mes arrancó feo, con reportes de muchas incidencias.
“Se dan casos muy tristes que afectan muchísimo el país, no somos una sociedad pacifista, los principios y valores que nos enseñaron nuestros abuelos se han perdido y eso se obtiene en la casa” aseveró.
También resaltó: “Con la evolución de la criminalidad, que es similar a la colombiana, desde el 2012 vienen en ascenso los crímenes. Sin embargo, estoy esperanzado en que podamos volver a la tranquilidad de antes, aunque sea tener un homicidio menos al finalizar el año”.
Para la Policía, los líderes criminales cada vez quieren más y más dinero, lo cual se evidencia con los constantes asaltos y robos que se dan en gran parte de Desamparados, de modo que obtienen un bono en estas épocas de fin y principio de año.
Cuando las personas honradas son víctimas de los delincuentes, que podrían actuar bajo los efectos de alguna droga, reciben amenazas de muerte, en el mejor de los casos, pero también algunos locazos accionan sus armas de fuego, que suelen ser calibre 38 y 9 mm, contra la humanidad de sus objetivos.
Datos de Seguridad Pública revelan que este tipo de delitos se presentan principalmente en horas de la noche o en la mañana, cuando sus víctimas, mayoritariamente mujeres, se desplazan a sus trabajos y les sustraen sus bolsos. Inclusive se tiene conocimiento de que los cacos se montan en los buses a asaltar.
